Ecuatorianos por el Mundo

Lo que hizo Michael Arroyo ante un insulto racial de una señora de 60 años en México

En México Gambetita recibió varios insultos pero hubo uno en el que puso el ejemplo

Por Fernando Camacho

En México Gambetita recibió varios insultos pero hubo uno en el que puso el ejemplo
En México Gambetita recibió varios insultos pero hubo uno en el que puso el ejemplo
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Uno de los jugadores más polémicos del fútbol ecuatoriano es el volante que todavía no sabe donde va a jugar, Michael Arroyo, elemento que fue sancionado en dos ocasiones por dopaje en sus diferentes etapas como jugador profesional, en ambas lo hicieron cuando jugó para los clubes de Guayaquil.

Arroyo recibió su primer dopaje al dar positivo en la prueba de dopaje que se la realizaron cuando jugaba en Emelec, la sustancia que encontraron en sus muestras fue marihuana, de ahí su popular apodo. Deportivo Quito logró recuperarlo y tras cumplir su sanción fue campeón con los Chullas.

Su recuperación fue gigante y se convirtió en uno de los jugadores ecuatorianos más conocidos en México, ganó varios títulos con el América de México y jugó también en el fútbol brasileño, también jugó para Barcelona SC donde alcanzó nuevamente el campeonato.

La prensa mexicana lo conoce muy bien y este jueves publicaron una nota sobre un caso de racismo que sufrió el jugador ecuatoriano en ese país, Diario El Milenio reveló que sus diálogos con la prensa o su predisposición para tratar con los hinchas dependía de su estado de ánimo.

El medio en mención reveló que luego de una práctica el ecuatoriano salió rápidamente de Coapa y se topó con una mujer de 60 años que le dijo, uy, no atiendes, tenías que ser negro. El jugador se regresó y tuvo que reaccionar ante el insulto que había recibido.

Arroyo se detuvo y le respondió a la señora que está muy orgulloso de ser negro. La mujer se quedó sorprendida y solo respondió: “Es que debería detenerse con la gente”. Y Michael siguió: “Yo siempre me detengo, pero hoy tengo prisa señora, no soy una mala persona y usted no me puede decir negro, porque lo hace como insulto; Sí soy negro y me gusta serlo y estoy orgulloso de mi color de piel”.

La señora ya no supo qué decir. No sabía dónde meterse, pero eso sí, le pidió a Michael le firmara su playera, el ecuatoriano lo hizo “con afecto”.


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