Liga de Quito y Barcelona SC reciben el peor golpe del 2020 de manera sorpresiva

Hoy, Liga Deportiva Universitaria de Quito y Barcelona Sporting Club regresaron a los entrenamientos con mira a poder volver a la actividad deportiva. El campeonato ecuatoriano de fútbol está por arrancar (se jugaría el 17 de julio) en las próximas semanas, pero aún es una duda si podrán seguir jugando la Copa Libertadores de América.

Y es que por medio de los canales oficiales de la Conmebol todavía no hay una fecha tentativa para su regreso y ahora muchos más que los diferentes torneos en Sudamérica están disparejos, en el sentido que unos países apenas acaban de regresar a las prácticas, mientras otros suspendieron sus competiciones o buscan un replanteamiento en sus formatos para terminar la temporada y tener a un campeón.

A continuación desglosamos en que estado se encuentra su torneo país por país. En Colombia el torneo se paró hace varios meses y aún están esperando el OK para poder retornar a entrenar; Perú, por otra parte, apunta a que el 31 de julio puedan volver y que se defina en Lima al campeón y vicecampeón.

Bolivia tiene un caso más extremo, pues según AS volverían a los entrenamientos recién entre septiembre y octubre, Chile se está preparando para volver a jugar el torneo regular el 31 de julio. Venezuela está en la incertidumbre total y todavía se analizan dos proyectos para el próximo torneo pero nada claro sobre los entrenamientos.

Brasil, pese a que tiene varios millones de contagiados por la pandemia de Covid-19 ya han autorizado el regreso del torneo carioca, según Globoesporte, mientras que Paraguay empezará con los entrenamientos individuales desde la siguiente semanas. Uruguay ha decidido que el 15 de junio regresen a las prácticas y que el torneo se reanude el 1 de agosto. Finalmente, Argentina pese a lo que se dijo que suspendía el torneo, con su nueva LigaPRO planean el regreso entre septiembre y octubre.

Ya que los equipos de los diferentes países estarán en desigualdad competitiva debido al poco o mucho ritmo de fútbol que tengan, o en el caso extremo que decidan retirarse varios equipos de la competición por la falta de garantías, la Copa Libertadores del 2020 corre el riesgo de suspenderse.

De darse el caso que se suspenda esta competición, el cuadro albo y el torero deberían arreglar el pago por adelantado de 1 millón de dólares, por los partidos de local. En caso que puedan volver la hinchada también el dinero de las taquillas se perderían y con eso deberían volver a reestructurarse en el tema económico.

También los contratos publicitarios se podrían ver afectados, pues lo que les interesan es que tengan exposición en el plano internacional, por lo que deberían llegar a un acuerdo y así no romper las relaciones. Cabe destacar que, pese a la pandemia, marcas se han quedado apoyando a los clubes.