"Dábamos la vida por él", Araujo contó que el Patón lo quiso sacar de esta final porque estaba lesionado y se negó

El Beto Araujo sostuvo que cómo él, también estaban lesionados otros de sus compañeros pero jugaban infiltrados

Liga de Quito / Foto: Infobae
Liga de Quito / Foto: Infobae
Foto de David Alomoto
Autor
Publicado:

La declaración de Norberto Araujo, "Dábamos la vida por él" al referirse a Edgardo Bauza, encapsula la mística que rodeaba a Liga de Quito durante su período más glorioso a nivel internacional. Tras conquistar la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana, el desafío de la Recopa Sudamericana 2010 ante Estudiantes de La Plata no era solo un título más, sino una reafirmación del dominio continental de LDU. El partido de vuelta, disputado en el Estadio Rodrigo Paz Delgado, sería el escenario de un acto de heroísmo y compromiso inusual por parte de su capitán.

La anécdota contada por Araujo revela la presión y el nivel de exigencia en las finales. Según el exdefensor, Edgardo Bauza percibió la vulnerabilidad física del capitán antes o durante el crucial partido. El "Patón", preocupado por la integridad del jugador y la estabilidad del equipo, quiso sacarlo de la cancha. Sin embargo, la voluntad de Araujo por estar presente en un momento tan importante para el club y su DT fue inquebrantable, decidiendo arriesgar su salud por el objetivo colectivo.

El sacrificio se materializó en una dura realidad: a tan solo diez minutos de iniciado el primer tiempo de la final de la Recopa 2010, Norberto Araujo sufrió un desgarro muscular. Esta lesión es lo suficientemente grave como para impedir que un deportista continúe, pero el defensor se negó rotundamente a ser sustituido. En lugar de ceder, solicitó ser atendido rápidamente y se vendó la zona afectada para seguir jugando, demostrando una resiliencia mental y física que trascendía el umbral del dolor.

El motor detrás de la decisión de Araujo no era solo la ambición por el título, sino la profunda conexión y lealtad hacia Edgardo Bauza. La frase "se jugaban la vida por el Patón Bauza" no es una hipérbole; refleja el tipo de líder que era el entrenador, alguien que generaba una confianza incondicional en sus jugadores. El simple hecho de que Araujo se negara a salir, priorizando la necesidad del equipo sobre el cuidado personal, se convirtió en la prueba máxima de la convicción que el DT había inculcado en el vestuario.

Cargando...

A pesar de jugar desgarrado durante gran parte del partido, Araujo logró mantenerse en el campo y fue fundamental para que la defensa de Liga mantuviera el empate 0-0 en La Plata (tras haber ganado 2-1 en la ida en Quito). Gracias a su tenacidad y la contribución de todo el equipo, LDU se consagró campeón de la Recopa Sudamericana 2010. Esta gesta no solo añadió otro trofeo a la vitrina, sino que grabó el sacrificio del capitán en la memoria de la hinchada como un símbolo del compromiso de esa gloriosa generación.

LO MÁS RECIENTE