Lo acusaron de amaño de partidos y el equipo que le daría una segunda oportunidad a David Cabezas
El portero salió de El Nacional junto con Anthony Bedoya luego de las polémicas en partidos del fútbol ecuatoriano
El nombre de David Cabezas, exarquero de El Nacional de Quito, se vio envuelto en una de las polémicas más serias del fútbol ecuatoriano en los últimos años: la sospecha de amaño de partidos. Aunque el jugador siempre defendió su inocencia y no hubo una sentencia definitiva en su contra, la acusación tuvo un efecto devastador en su carrera, llevando a su salida del club y dificultando su continuidad en el fútbol profesional en Ecuador.
Tras el escándalo y el estancamiento de su carrera en Ecuador, David Cabezas ha estado buscando desesperadamente una "segunda oportunidad" para limpiar su nombre y relanzar su carrera deportiva. La presión mediática y el estigma de la acusación en el ámbito local han hecho que su mirada se dirija inevitablemente al extranjero, donde puede enfocarse únicamente en el fútbol y dejar atrás las controversias.
Según el periodista deportivo Juanjo Pérez, el exguardameta de El Nacional se ha convertido en una opción real para reforzar el arco de un gigante del fútbol paraguayo: el Club Olimpia de Asunción. Este interés, de concretarse, sería un giro de 180 grados en la carrera de Cabezas, brindándole la posibilidad de jugar en un club con gran historia y participación recurrente en la Copa Libertadores.
Un factor determinante que facilita esta posibilidad es la presencia de una figura conocida para el fútbol ecuatoriano en el banquillo del Olimpia. El club paraguayo es actualmente dirigido por el legendario técnico uruguayo-paraguayo Ever Hugo Almeida, quien tiene un profundo conocimiento del fútbol ecuatoriano, ya que dirigió a El Nacional y a la Selección de Ecuador. Almeida podría estar dispuesto a darle una oportunidad a Cabezas, confiando en su capacidad técnica más allá de las controversias.
El hecho de que un club de la jerarquía de Olimpia esté considerando a Cabezas, y bajo el aval de un entrenador experimentado como Almeida, representa un gran acto de confianza. Este movimiento sugiere que el cuerpo técnico paraguayo considera que la calidad futbolística del arquero es superior a la controversia que lo rodeó. Para Cabezas, esta sería la validación que necesita para demostrar que su enfoque está en el deporte.
Si se concreta su fichaje por Olimpia, el desafío para David Cabezas será doble: no solo tendrá que adaptarse a un fútbol nuevo, sino también recuperar la forma y la confianza perdidas. Su objetivo será consolidarse como titular en un club de alta exigencia, demostrando que su rendimiento en la cancha es lo único que debe importar y que merece esta valiosa segunda oportunidad para brillar en el ámbito internacional.