Beccacece lo hizo de menos en la Tri pero ahora el Chelsea quiere pagar 7 millones para firmarlo
El cuadro inglés tiene la intención de contratar a un ecuatoriano que es figura para todos, menos para Beccacece
El mundo del fútbol ecuatoriano es testigo de una de las paradojas más notables de la temporada: el joven talento Jeremy Arévalo, quien fue minimizado por el cuerpo técnico de La Tri, incluyendo a Sebastián Beccacece, ahora está en el centro de una guerra de fichajes en Europa. El contraste es brutal: mientras en Ecuador no se le dio la confianza esperada, el Chelsea FC de Inglaterra está dispuesto a pagar la imponente cifra de 7 millones de euros para asegurar sus servicios, validando su potencial de forma categórica.
La seriedad del interés es palpable, y el dato millonario que confirma el potencial de Arévalo fue revelado por la cuenta especializada ‘Thomas’ en redes sociales. El insider reportó que el agente del jugador ecuatoriano se reunió esta misma semana con el consorcio BlueCo, el holding propietario del Chelsea y del Estrasburgo francés. El club inglés ha puesto el dinero sobre la mesa: €7 millones para superar la competencia y cerrar el fichaje del prometedor mediocampista.
La estrategia de fichaje de Chelsea revela un conocimiento profundo del mercado y demuestra expertise en la gestión de jóvenes promesas. La propuesta es que Arévalo firme con BlueCo e inicie su adaptación en el Estrasburgo de la Ligue 1. Este paso intermedio es crucial, pues permite al jugador acostumbrarse al rigor y la velocidad del fútbol europeo sin la presión inmediata de la Premier League. El destino final, sin embargo, es claro: el Chelsea. La cifra de €7 millones se justifica en su edad (20 años) y su alta proyección de reventa a futuro.
Esta oferta millonaria actúa como una lupa sobre el "menosprecio" que Arévalo sintió en La Tri. Durante el proceso de los últimos partidos amistosos, el entrenador Beccacece lo llevó solo para que juegue unos minutos y además le dijeron que estaba pasado de peso, lo que generó frustración en el jugador y en la afición. Esta falta de confianza, contrastada con la audacia de un club de élite como el Chelsea, subraya el error de cálculo cometido en el ámbito local.
Sin embargo, el camino no está despejado. El Stuttgart, equipo alemán conocido por su capacidad para desarrollar y proyectar talento joven, se encuentra también en la carrera. La decisión final, tal como se reportó, recae en Arévalo. Debe elegir entre la ambiciosa ruta del consorcio BlueCo—que promete el glamour de la Premier League—o la solidez de un proyecto alemán donde podría tener más minutos de juego inmediato.
El interés del Chelsea por 7 millones de euros es la validación internacional definitiva del talento de Jeremy Arévalo. La decisión que tome definirá si el menosprecio en La Tri se convierte en una anécdota irrelevante. El ecuatoriano tiene una oportunidad única para demostrar que aquellos que lo hicieron de menos perdieron de vista un activo millonario, iniciando un nuevo capítulo en el fútbol de élite.
