Por David Alomoto
Michael Jackson Quiñónez contó en Reyes de Copas que cuando Neymar visitó Ecuador, lo cobijó y le hizo sentir como en su casa. Y es que el Rey del Pop ya conocía al astro brasileño de su paso por Santos FC. A cambio, el 10 le regaló una camiseta. Michael Jackson contó algunas anécdotas de su paso por el fútbol ecuatoriano y en el brasileirao.
Michael Jackson Quiñónez, el talentoso volante ecuatoriano, tuvo una fugaz pero intensa experiencia en el Santos de Brasil. Su llegada al club brasileño en 2013 generó gran expectativa, siendo presentado como el próximo gran talento del fútbol sudamericano y comparado con Neymar, quien por aquel entonces ya brillaba con luz propia en el equipo. Sin embargo, las lesiones truncaron su prometedora carrera en el Peixe.
La llegada al Santos y las altas expectativas
Quiñónez, proveniente de Barcelona Sporting Club, llegó al Santos con la ilusión de triunfar en uno de los clubes más grandes de Brasil. Su habilidad con el balón, su visión de juego y su capacidad para desequilibrar partidos lo convertían en una promesa del fútbol ecuatoriano. Los hinchas santistas lo recibieron con los brazos abiertos, esperando que se convirtiera en el nuevo ídolo del equipo.
El encuentro con Neymar
Una de las anécdotas más recordadas de la etapa de Quiñónez en el Santos fue su encuentro con Neymar. Ambos jugadores compartieron vestuario durante un breve periodo y forjaron una amistad. Neymar, ya consolidado como una estrella mundial, vio en Quiñónez un gran potencial y lo apoyó en su adaptación al fútbol brasileño.
Las lesiones: un obstáculo insalvable
Lamentablemente, las lesiones se convirtieron en el principal obstáculo para que Quiñónez pudiera demostrar todo su talento en el Santos. Sufrió varias lesiones musculares que lo marginaron de las canchas durante largos periodos, impidiéndole consolidarse en el equipo titular.
El regreso a Ecuador y la búsqueda de nuevas oportunidades
Tras su paso por el Santos, Quiñónez regresó a Ecuador en busca de nuevas oportunidades. Jugó en varios equipos del fútbol ecuatoriano, como Liga de Quito y Deportivo Cuenca, pero nunca pudo recuperar el nivel mostrado en sus inicios.
Un talento que no pudo explotar al máximo
La historia de Michael Jackson Quiñónez en el Santos es un claro ejemplo de cómo las lesiones pueden truncar la carrera de un futbolista. El ecuatoriano tenía todas las condiciones para convertirse en una estrella mundial, pero las lesiones lo obligaron a abandonar sus sueños.
Un legado que perdura
A pesar de que su paso por el Santos fue breve, Quiñónez dejó una huella imborrable en el fútbol ecuatoriano. Su talento y su carisma lo convirtieron en uno de los jugadores más queridos por la afición. Además, su amistad con Neymar es una anécdota que siempre será recordada.
04/12/2024
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