El periodista al que Michel Deller denunció y hasta pidió privación de libertad, no es Iván Triviño

El ambiente mediático en el fútbol ecuatoriano se ha encendido tras conocerse una acción legal de alto impacto. El periodista en el centro de la controversia es Eduardo Erazo, y no Iván Triviño como se había especulado en ciertos círculos. El directivo de Independiente del Valle, Michel Deller, ha escalado su campaña contra las declaraciones difamatorias presentando una demanda directa contra Erazo por supuestas afectaciones al honor e integridad del dirigente, marcando un precedente en la relación entre la dirigencia deportiva y la prensa.

Esta demanda contra un comunicador social se inscribe dentro de una estrategia legal más amplia iniciada por la dirigencia de Independiente del Valle. Anteriormente, Michel Deller ya había tomado medidas similares contra figuras prominentes del fútbol ecuatoriano, incluyendo al directivo de Mushuc Runa, Luis Alfonso Chango, y al exentrenador de clubes grandes, Luis Zubeldía. La acción contra Erazo subraya la determinación del club y sus directivos de usar la vía judicial para salvaguardar su reputación ante comentarios considerados injuriosos.

El eje central de la disputa legal radica en una publicación realizada por Eduardo Erazo en la red social X. En dicha publicación, el periodista insinuó presuntas irregularidades dentro del club, haciendo referencia a "cuanto $$ es cada servicio de comida" y sugiriendo que la hermana de otro involucrado tenía conocimiento de un tema delicado, afirmando que "alguien algún día lo dirá”. La demanda argumenta que estas expresiones constituyen difamación y socavan el buen nombre y prestigio de Michel Deller, quien busca una reparación legal.

La postura de Michel Deller en el documento oficial enfatiza la construcción de una carrera profesional basada en la moral y la ley, y el esfuerzo dedicado a un proyecto deportivo, Independiente del Valle, "dirigido a la niñez y juventud del país". Con esta declaración, la defensa busca contrastar la labor social y profesional del demandante con las "expresiones de descrédito o deshonra" del periodista, solicitando una sentencia que no solo repare el daño, sino que también siente un "precedente ejemplificador".

El pedido de la defensa de Deller es drástico y busca aplicar la máxima sanción permitida en estos casos. Específicamente, solicitan que Eduardo Erazo sea condenado a la pena privativa de libertad de 15 a 30 días, tal como lo establece el numeral 1 del artículo 396 del Código Orgánico Integral Penal (COIP). Esta tipificación corresponde a las contravenciones de cuarta clase.

La figura legal invocada aplica a "la persona que, por cualquier medio, inclusive a través de cualquiera de las tecnologías de la información y comunicación, profiera expresiones en descrédito o deshonra en contra de otra, ya sea mediante lenguaje violento, agresivo, vulgar u hostil". El objetivo final de la demanda, con la petición de privación de libertad, es enviar un mensaje contundente sobre los límites de la crítica periodística en Ecuador y la gravedad con la que el directivo de Independiente del Valle toma las declaraciones que considera lesivas para su honor y el prestigio del club.