El técnico de Liga de Portoviejo contó lo que le dijo Bryan Angulo luego del tenso momento que vivió

El mundo del fútbol se paralizó momentáneamente ante el delicado momento que vivió el futbolista ecuatoriano Bryan Angulo. En medio de esta preocupación, fue Raúl Duarte, el director técnico de Liga de Portoviejo (LDUP), quien se convirtió en una fuente de alivio al revelar detalles sobre el estado de salud del jugador, gracias a una comunicación directa con él. La noticia, difundida a través de Radio Scándalo de Manabí, trajo tranquilidad a la afición, especialmente la manabita, por la cercanía entre el club del entrenador y la región de origen del delantero.

En sus declaraciones para el medio radial, el estratega paraguayo, Raúl Duarte, manifestó que logró conversar telefónicamente con Bryan Angulo luego del tenso incidente. Este contacto fue crucial para el entorno deportivo, dado que Angulo, conocido como el Cuco, es una figura relevante en el fútbol nacional. La llamada sirvió no solo para expresar el apoyo del entrenador, sino para recibir de primera mano el parte de tranquilidad que todos esperaban.

El mensaje más importante que el delantero transmitió a su interlocutor fue que se encontraba "fuera de peligro". Esta afirmación de Bryan Angulo, directamente a su colega de profesión, disipó los temores sobre las consecuencias del suceso, confirmando que su vida no corría riesgo. Este tipo de comunicación directa entre figuras del fútbol, en momentos de crisis, resalta la fraternidad y el apoyo que existe más allá de la competencia en el campo de juego.

Mientras la noticia sobre Angulo daba un respiro a la comunidad deportiva, el equipo de Duarte, Liga de Portoviejo, debía centrarse nuevamente en la competencia. El reporte, citado por Ramón Morales, confirmaba que el equipo manabita emprendía viaje hasta la ciudad de Guayaquil. El destino era enfrentar a su rival de turno, el equipo conocido como Búhos ULVR, en un crucial encuentro correspondiente a las instancias finales del torneo de Segunda Categoría, donde LDUP busca el ascenso.

Este contraste de realidades marca el pulso del fútbol: por un lado, la preocupación humana por la integridad de un colega; por el otro, la ineludible exigencia de la competencia. El viaje de LDUP a Guayaquil para encarar el partido de vuelta de los playoffs de ascenso, tras una polémica victoria previa con un "gol fantasma", mostraba al club concentrado en sus aspiraciones deportivas, a pesar de los duros momentos extradeportivos que rodean al fútbol ecuatoriano, incluyendo denuncias de amenazas a sus propios jugadores.