Por Mateo Garzón
Christian Noboa reveló que casi llega a Barcelona SC, pero el Rubin Kazan no lo permitió: "Cuando tenía todo arreglado, Rubin Kazan (de Rusia) dijo que no. El entrenador dijo que me vaya, pero que debía jugar un partido más, que me necesitaba. Hice dos asistencias y ya no me dejaron irme", esto en una entrevista con Concentra'o.
La posibilidad de que Christian Noboa, ícono de Emelec, recalara en las filas de Barcelona SC, su acérrimo rival, hubiera sido uno de los movimientos más polémicos y trascendentales en la historia del fútbol ecuatoriano. Este traspaso hipotético habría reconfigurado por completo la dinámica del clásico del astillero y generado un debate nacional sin precedentes.
La rivalidad entre Emelec y Barcelona SC es una de las más intensas de Sudamérica. Por lo tanto, el fichaje de Noboa por el equipo amarillo habría sido mucho más que un simple traspaso de un jugador a otro equipo. Habría sido una declaración de intenciones, una muestra de ambición por parte de Barcelona y un golpe anímico para Emelec.
Para los hinchas amarillos, la llegada de Noboa habría sido un sueño hecho realidad. Un jugador de su talla, con su experiencia y liderazgo, habría sido el refuerzo ideal para aspirar a títulos locales e internacionales. Su presencia en el equipo habría generado una gran expectativa y habría motivado a los aficionados a acudir al estadio en masa.
Por otro lado, para Emelec, la partida de Noboa habría sido una pérdida irreparable. El "Zar" se había convertido en un ícono del equipo eléctrico y su ausencia se habría sentido mucho en el campo de juego. La hinchada azul habría vivido un momento de gran tristeza y decepción, al ver a uno de sus máximos referentes abandonar el equipo para unirse a su rival de toda la vida.
Desde el punto de vista deportivo, la llegada de Noboa a Barcelona SC habría significado un refuerzo de lujo para el equipo amarillo. Su experiencia en el fútbol internacional, su visión de juego y su capacidad para marcar goles habrían sido un gran aporte para el equipo. Además, su presencia en el equipo habría aumentado la competitividad del clásico del astillero, convirtiéndolo en un duelo aún más atractivo para los aficionados.
La reacción de la afición habría sido dividida. Por un lado, los hinchas de Barcelona SC habrían celebrado con euforia la llegada de Noboa, mientras que los hinchas de Emelec habrían expresado su rechazo y su decepción. Este traspaso habría generado un gran debate en los medios de comunicación y en las redes sociales, polarizando aún más a la afición ecuatoriana.
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