Hoy juega en Liga de Quito y Tiago Nunes lo hizo crack, se reveló que Emelec le quedó debiendo 120 mil dólares
Con el entrenador brasileño en LDU le ha ido mucho mejor que en Emelec, se trata de Alejandro Cabeza
La carrera del delantero ecuatoriano Alejandro Cabeza ha tomado un rumbo significativamente más positivo desde su llegada a Liga de Quito, un cambio de aires que parece haber sido clave para su resurgimiento futbolístico. Tras etapas en varios clubes, incluyendo un paso notable por Emelec, el ariete encontró en el conjunto 'albo' un entorno ideal para consolidarse, en gran parte gracias a la confianza depositada por el entrenador brasileño Tiago Nunes. Bajo la dirección de Nunes, Cabeza ha pasado de ser un jugador con potencial intermitente a una pieza de recambio fundamental y un arma ofensiva determinante, mostrando una evolución que lo ha convertido en una figura más madura y eficiente dentro del campo de juego.
Mientras su presente en la 'U' capitalina es brillante, su pasado reciente se vio empañado por problemas administrativos. Según reportes periodísticos, se ha ventilado que el Club Sport Emelec le habría quedado a deber una cifra considerable, estimada en 120 mil dólares. Esta supuesta deuda pone en evidencia la crisis económica y de gestión que ha afectado al club guayaquileño en los últimos años, un factor que no es ajeno al malestar de varios jugadores en el plantel. La existencia de estos impagos contractuales podría haber afectado el ánimo y el rendimiento del jugador durante su estadía en el equipo 'eléctrico', sumándose a una lista de deportistas que han tenido fricciones con la dirigencia por temas salariales.
El contraste entre su rendimiento en Emelec y su actualidad en Liga de Quito es notorio. Si bien en el 'Bombillo' Alejandro Cabeza tuvo chispazos de calidad, llegando incluso a marcar un hat-trick contra Universidad Católica en una ocasión, su paso estuvo marcado por la irregularidad y la falta de continuidad total. La presión del club, sumada a los problemas internos, impidió que desplegara su mejor versión de forma constante. Sus estadísticas en el cuadro 'millonario', donde jugó 94 partidos según datos de rendimiento, reflejan una etapa con altibajos, a pesar de sus 25 goles y 14 asistencias en total con el club.
En Liga de Quito, en cambio, y de la mano de Tiago Nunes, Cabeza ha encontrado su mejor versión. Aunque su rol principal suele ser el de un delantero alterno o un revulsivo, el estratega brasileño ha sabido potenciar sus características de velocidad, potencia y definición. Nunes lo ha utilizado estratégicamente, permitiéndole ser una pieza clave para desatascar partidos o para darle un aire fresco al ataque en los segundos tiempos. Esta función específica le ha permitido ser más efectivo con menos minutos, un indicador de que el sistema del entrenador se adapta mejor a sus cualidades.
La relación con Tiago Nunes va más allá de la simple alineación táctica; parece ser un factor de confianza que ha impulsado al jugador. El entrenador brasileño es conocido por su manejo de grupo y su capacidad para recuperar el nivel de jugadores que vienen de momentos difíciles. Bajo su tutela, Cabeza ha mejorado en la toma de decisiones y ha incrementado su aporte goleador y de asistencias en momentos cruciales para el equipo 'albo', siendo un elemento decisivo en varios encuentros de la LigaPro e incluso en torneos internacionales.
En conclusión, la situación de Alejandro Cabeza es un claro ejemplo de cómo el cambio de equipo y, sobre todo, el impacto de un entrenador como Tiago Nunes, pueden revitalizar una carrera. De un entorno complicado en Emelec, marcado por supuestas deudas que rondan los $120.000 y una irregularidad deportiva, el delantero ha pasado a ser una figura clave en Liga de Quito. El ambiente de confianza y el manejo estratégico del DT han sido esenciales para que Cabeza se sienta valorado y pueda rendir a un nivel que lo establece como un atacante importante en el fútbol ecuatoriano.