Los millones que vale mandar a Ismael Rescalvo de Barcelona SC, mejor lo mantendrán en el cargo
El entrenador español está lejos de salir del equipo Canario, al menos hasta diciembre del 2025
La figura de Ismael Rescalvo en el banquillo de Barcelona Sporting Club se ha convertido en un tema central de debate y controversia entre la hinchada, especialmente tras los resultados inconsistentes. Sin embargo, más allá del rendimiento deportivo, la estabilidad del entrenador español en el club de Guayaquil está fuertemente ligada a factores económicos, una realidad que condiciona por completo la toma de decisiones de la dirigencia.
La principal razón que ata a Rescalvo al cargo es el elevado costo de su desvinculación. Según fuentes de Guayaquil y reportes de prensa que manejan la información financiera del club, una posible rescisión de contrato del director técnico español se tasaría alrededor de un millón de dólares. Esta cifra representa una carga económica insostenible para un club que, históricamente, ha lidiado con serios problemas de liquidez y arrastra deudas pendientes.
El contrato firmado por Ismael Rescalvo con Barcelona SC se extiende hasta finales de la temporada 2026. La larga duración del acuerdo, negociado en un momento de necesidad de un nuevo proyecto deportivo, es ahora el principal obstáculo financiero para un cambio de timón. Si la directiva decide cesarlo, debe asumir la totalidad o una parte significativa del salario restante hasta el vencimiento del vínculo, lo que se traduce en un gasto millonario que el club no está dispuesto a afrontar.
El panorama económico se vuelve más complejo si se considera el historial reciente de Barcelona SC. La institución ha enfrentado múltiples demandas y sanciones por deudas previas con entrenadores y jugadores, lo que ha generado advertencias de resta de puntos en la LigaPro. Asumir un nuevo y abultado pasivo con el finiquito de Rescalvo y la posterior contratación de un nuevo cuerpo técnico es un riesgo que la directiva prefiere evitar a toda costa, priorizando la estabilidad financiera.
Ante este dilema económico, la dirigencia de Barcelona SC se ve forzada a "mantener" a Ismael Rescalvo en su cargo, a pesar del descontento de la hinchada y las críticas por el nivel de juego del equipo. Esta decisión no obedece a una convicción deportiva total, sino a una estrategia de contención de costos. En el complejo fútbol ecuatoriano, a veces resulta más barato mantener a un entrenador cuestionado que pagar la cláusula de un contrato extenso y bien remunerado.
En resumen, los millones que vale la salida de Ismael Rescalvo se han transformado en su mejor escudo protector. La cifra de alrededor de 1 millón de dólares que costaría su despido, según fuentes locales, actúa como un "blindaje económico" que frena cualquier intención de cambio. Por lo tanto, el futuro inmediato del director técnico español en Barcelona SC se define más en la oficina de contabilidad que en el campo de juego.
