Macará silenció el Monumental, le ganó a Barcelona SC y mira la excusa que puso Rescalvo
El entrenador habló en rueda de prensa, piso de excusa que el partido fue bastante incómodo
El Monumental, un estadio acostumbrado a celebrar las victorias de Barcelona SC, se sumió en un silencio inesperado tras la derrota de su equipo ante Macará. El resultado, un 1-0 en contra, no solo significó la pérdida de tres puntos cruciales, sino que también evidenció las falencias de un equipo que no logra encontrar la regularidad necesaria para pelear por la punta. La frustración de la hinchada era palpable, y las explicaciones del entrenador, Jorge Sampaoli, se convirtieron en el centro de la polémica post-partido.
Tras el encuentro, Sampaoli no se anduvo con rodeos al admitir que el desempeño de su equipo en casa ha sido deficiente. "Nos ha faltado regularidad en casa, especialmente por los resultados donde se han perdido puntos que no nos permiten engancharnos más cerca del primer puesto", afirmó el estratega. Esta autocrítica, aunque sincera, no fue suficiente para calmar la marea de indignación de los aficionados. La falta de puntos en su propio terreno de juego, el lugar donde se espera que el equipo sea más fuerte, es un problema que ha afectado las aspiraciones de Barcelona SC en lo que va de la temporada.
El técnico fue más allá al señalar que el partido contra Macará fue el más "incómodo" que han enfrentado. "Hoy de todos los partidos que hemos jugado ha sido el partido más incómodo que hemos tenido", reconoció Sampaoli. Esta declaración, sin embargo, generó un debate sobre si la excusa era válida o si simplemente reflejaba la falta de preparación de su equipo. Un club de la talla de Barcelona SC, con un plantel de jugadores experimentados y talentosos, no debería sentirse incómodo en su propio estadio, sin importar el rival que tengan en frente.
En un gesto de humildad, el entrenador también ofreció disculpas a la afición, reconociendo la deuda que tienen con ellos. "Hoy nos encontramos con un equipo de Barcelona que no estábamos cómodos, estamos en debe con la afición, le pedimos disculpas a la afición", expresó Sampaoli. Este acto de contrición, aunque necesario, resalta la presión que enfrenta el equipo. La hinchada, que siempre exige la excelencia, no se conforma con promesas y disculpas, sino que anhela ver resultados tangibles en el campo de juego.
La derrota ante Macará no es un hecho aislado, sino que se suma a una serie de resultados que han dejado a Barcelona SC rezagado en la tabla. La falta de regularidad en casa, un problema recurrente según el propio Sampaoli, ha minado la confianza del equipo y de la afición. Los puntos perdidos en el Monumental son un lastre que les impide acercarse a los líderes y mantener viva la esperanza de ganar el título.
A pesar de la amargura de la derrota, Sampaoli insistió en la necesidad de seguir trabajando y mirar hacia el futuro. "Toca seguir trabajando para seguir y el fin de semana tenemos una revancha", concluyó. La promesa de una revancha, aunque motivadora, será puesta a prueba en el próximo encuentro. Los aficionados, que han vivido una noche de frustración y silencio en su propia casa, esperan que el equipo demuestre con hechos que las disculpas no son solo palabras vacías, y que la única forma de enmendar la situación es con victorias que los acerquen al ansiado primer puesto.