No es aporte para Barcelona SC y en vez de entrenar para mejorar se fue a una fiesta y lo captaron
En el cuadro del Ídolo del Ecuador no todos están enfocados en sacar adelante al equipo
La situación de Dixon Arroyo en el Barcelona Sporting Club (BSC) se ha tornado aún más tensa. El mediocampista, que ya venía siendo objeto de fuertes críticas por su bajo rendimiento en la cancha, ha sido captado en un evento social en un momento clave de la temporada, desatando la indignación de la afición. Esta acción genera dudas sobre el compromiso del jugador, en un momento en que el equipo necesita la máxima dedicación de sus elementos.
Las críticas hacia Dixon Arroyo se han centrado en su falta de impacto en la mitad del campo. El jugador "no ha sido aporte" esperado en la zona de contención del Barcelona SC, una posición vital para el equilibrio del equipo. Su rendimiento ha sido catalogado por muchos como uno de los "peores de Barcelona SC" en la última etapa, lo que ha provocado que su nombre sea uno de los más cuestionados por la hinchada.
La controversia escaló cuando se reveló que Dixon Arroyo, en lugar de enfocarse en mejorar su estado físico y nivel de juego, se fue a una fiesta y fue captado en el evento. Específicamente, el mediocampista asistió a la celebración de cumpleaños de la presentadora Carolina Jaume, quien festejaba sus 40 años. Las imágenes del jugador en el evento social rápidamente se hicieron virales, poniendo su profesionalismo en tela de juicio.
El principal problema de esta situación radica en la percepción de compromiso ante la afición. En un club de la magnitud del Barcelona SC, y más aún cuando el rendimiento deportivo es cuestionable, se espera que los jugadores mantengan un perfil bajo y una dedicación absoluta al entrenamiento y al descanso. Ser captado en una fiesta en este contexto, sugiere a los ojos del hincha una falta de profesionalismo y un aparente desinterés en revertir su mala racha.
Esta situación podría acarrear consecuencias internas para Dixon Arroyo. El cuerpo técnico del BSC, que exige disciplina y enfoque total, seguramente tomará nota de este incidente. La asistencia a eventos sociales en momentos de baja forma deportiva y alta exigencia del calendario puede ser motivo de sanciones internas o, al menos, un factor que influya negativamente en la consideración del jugador para el once titular en los próximos partidos cruciales.
La presencia de Dixon Arroyo en la fiesta de Carolina Jaume ha generado una nueva polémica que opaca su ya criticado desempeño. El mediocampista, que no ha sido aporte en la cancha, será cuestionado por la afición por no priorizar su entrenamiento. La imagen captada envía un mensaje de poco compromiso que contrasta con la intensidad que exige el Barcelona SC a sus jugadores.
