Por Pablo Ordoñez
El Estadio Rodrigo Paz Delgado fue testigo de la contundente victoria de Liga de Quito sobre Central Córdoba por 3-0, un resultado que selló su clasificación a los octavos de final de la Copa Sudamericana. Tras el pitazo final, la figura de Patricio "Pato" Hurtado, quien asumió la dirección técnica de manera interina, compareció ante los medios de comunicación, reflejando en sus palabras la esencia de un triunfo trabajado y la identidad intrínseca del club.
Hurtado, visiblemente satisfecho, abrió su intervención destacando el esfuerzo comprimido en poco tiempo: "Trabajamos dos días y estoy contento por el resultado". Esta declaración subrayó el desafío logístico y deportivo que enfrentó el cuerpo técnico y los jugadores, quienes debieron adaptarse rápidamente a las indicaciones de Hurtado en un período de transición. La eficacia de ese trabajo exprés se tradujo en el marcador final, que no solo confirmó el pase a la siguiente fase, sino que también otorgó una inyección de confianza al plantel.
El "Pato" no escatimó en reconocer la labor colectiva: "Ayudamos al equipo en lo que pudimos estos días para lograr la victoria". Sus palabras denotaron humildad y un enfoque en el servicio al club, una característica que siempre se le ha atribuido desde sus tiempos como jugador y en sus anteriores roles en el cuerpo técnico. Esta frase resonó con la imagen de un hombre de la casa, profundamente identificado con los colores y la filosofía de Liga.
Sin embargo, el punto álgido de su rueda de prensa llegó al referirse a la mística de la institución: "LIGA es LIGA, tiene esa jerarquía, ese carácter y hay que demostrarlo partido a partido." Esta poderosa afirmación encapsula la esencia del club, su rica historia en torneos internacionales y la mentalidad ganadora que ha forjado a lo largo de los años. Es un recordatorio de que, más allá de momentos específicos o cambios en el banquillo, la grandeza de Liga se sustenta en una identidad forjada en la élite del continente. La frase "LIGA es LIGA" se convierte en un mantra que la hinchada y el propio equipo entienden como un llamado a la excelencia constante, a la exigencia de competir siempre al más alto nivel.
La victoria ante Central Córdoba no fue solo un paso en la Copa Libertadores fue una reafirmación de que, incluso en situaciones de interinato, la jerarquía de Liga prevalece. La clasificación a octavos de final permite al club mantener viva la ilusión en el frente internacional, un terreno donde históricamente ha cosechado sus mayores éxitos. La rueda de prensa del "Pato" Hurtado, breve pero contundente, no solo informó sobre el resultado, sino que también transmitió un mensaje de resiliencia, adaptación y el inalterable ADN ganador del "Rey de Copas" ecuatoriano.
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