¿Puede perder la Categoría? Acusaron a un grande de Ecuador que habría jugado sus últimos 3 partidos suspendido
Todavía no se han pronunciado desde la LigaPro o la FEF sobre esta delicada situación de El Nacional
Una controversia significativa ha surgido en el fútbol ecuatoriano, ya que se ha revelado que El Nacional habría disputado sus últimos tres partidos estando, supuestamente, suspendido deportivamente. Esta situación genera un grave cuestionamiento sobre la legalidad de los resultados obtenidos por el club en esos encuentros, y podría acarrear serias consecuencias si se confirma que la suspensión era vigente.
El motivo de esta alegada suspensión se remonta a una deuda que El Nacional mantenía con el futbolista Jipson Orovio. Según la información disponible, existía un acuerdo de pago entre el club y el jugador, pero la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) ha asegurado que no recibió la cuota correspondiente a dicho acuerdo. Esto habría desencadenado la suspensión automática del club, impidiéndole participar en competiciones oficiales hasta regularizar su situación.
La polémica radica en que, a pesar de la supuesta suspensión vigente, El Nacional fue habilitado para jugar sus recientes compromisos de Liga Pro. Esto ha generado un manto de duda sobre la transparencia en la gestión administrativa y deportiva de la FEF y de la propia Liga Pro, ya que un club suspendido no debería tener permitido saltar a la cancha.
Hasta el momento, la FEF no ha emitido un pronunciamiento oficial claro que explique por qué El Nacional pudo competir si la suspensión estaba activa. Esta falta de claridad ha alimentado la especulación y la preocupación entre los demás equipos de la liga, quienes podrían reclamar los puntos de los partidos disputados contra El Nacional si se demuestra que el club no estaba en regla.
El Nacional, por su parte, ha emitido comunicados desmintiendo una posible suspensión, afirmando que buscan "afectar la imagen de nuestra institución" y reiterando su compromiso con la transparencia y el cumplimiento de las normativas. Sin embargo, la persistencia de la información sobre la deuda con Jipson Orovio y la postura de la FEF mantienen la incertidumbre.
La situación es delicada y podría tener un impacto significativo en la tabla de posiciones y en la integridad del torneo. Si se comprueba que El Nacional jugó suspendido, las implicaciones serían graves, posiblemente llevando a la pérdida de puntos en los partidos en cuestión, lo que afectaría no solo al club "militar" sino también a la competitividad y credibilidad de la Liga Pro.
