Revelaron la verdadera causa del ataque al Cuco Angulo, cuando iba a entrenar en Liga de Portoviejo
El delantero ecuatoriano resultó herido y lo llevaron a una casa de saluda de inmediato. Ya está fuera de peligro
El brutal ataque sufrido por el futbolista Brayan "Cuco" Angulo, quien fue baleado en las afueras del estadio Reales Tamarindos de Portoviejo tras un entrenamiento con Liga de Portoviejo, ha sacudido al deporte ecuatoriano y ha revelado una alarmante conexión con uno de sus problemas más oscuros: el amaño de partidos. Este acto de violencia, que puso en riesgo la vida del jugador, trasciende el ámbito criminal común para adentrarse en las complejas redes de corrupción que están contaminando el balompié nacional.
La posible causa de este atentado fue confirmada por una alta autoridad gubernamental. El viceministro de Deportes, José David Jiménez, rompió el silencio sobre el caso en diálogo con Andrea Morales para Direct Fútbol. El funcionario no dudó en advertir públicamente que, aunque el caso está bajo investigación de las autoridades competentes, la información preliminar sugiere que el ataque estaría directamente relacionado con el amaño de partidos y las conductas delictivas asociadas a estas prácticas.
Las declaraciones de Jiménez son sumamente graves, pues no solo confirman la seriedad de lo ocurrido, sino que también contextualizan el incidente en un problema estructural que afecta a todas las categorías del fútbol ecuatoriano. "Todo da a entender que son conductas y delitos relacionados a los problemas que tiene hoy el fútbol ecuatoriano (amaño de partidos). Y pasa en Segunda, Serie A y Serie B", declaró el viceministro, confirmando que la enfermedad de la corrupción en las apuestas ha penetrado profundamente en el deporte.
El viceministro, quien expresó su solidaridad con el jugador y con el club manabita, lamentó la situación y garantizó el respaldo del Gobierno en la búsqueda de la verdad. "Me solidaricé con Liga de Portoviejo, he esperado un tiempo para hablar con Brayan Angulo. Cuentan con nuestro apoyo, estamos investigando con la Policía Nacional", afirmó Jiménez, subrayando la urgencia de esclarecer el suceso y actuar contra las amenazas que han convertido al fútbol en un entorno de riesgo para sus protagonistas.
La confirmación de este posible vínculo entre el ataque al "Cuco" Angulo y las redes de amaño de partidos enciende todas las alarmas a nivel nacional. Este atentado se erige como una trágica prueba de que las amenazas y presiones denunciadas en el fútbol han escalado a la violencia física. La situación exige una respuesta contundente y un trabajo coordinado entre el Ministerio del Deporte, la Policía Nacional y la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
Ante este escenario crítico, las autoridades han reiterado su compromiso de combatir la corrupción. La urgencia ahora se centra en reforzar los mecanismos de control, seguridad y protección para futbolistas, dirigentes, y árbitros. El caso de Brayan Angulo ha servido como un doloroso recordatorio de que la integridad del fútbol ecuatoriano está en peligro y que se requiere una acción decidida e inmediata para sanear el deporte y garantizar la seguridad de todos sus actores.
