(VIDEO) Barcelona SC ignoró el FairPlay ante El Nacional por querer hacer un gol, esto pasó

Barcelona SC se fue a las duchas empatando 0-0 ante El Nacional en el estadio Monumental. El equipo de Segundo Castillo ignoró el FairPlay al último minuto porque no paró el balón cuándo David Cabezas estaba en el suelo, tras fuerte choque contra uno de sus defensores, la banca Criolla se levantó y empezó a reclamar.

Barcelona SC solo pateó una vez al arco de El Nacional el 1er tiempo

En el primer tiempo del partido entre Barcelona SC y El Nacional, disputado el 18 de abril de 2024 por la novena fecha de la LigaPro, el equipo torero no logró realizar ningún remate al arco rival. A pesar de dominar la posesión del balón con un 68%, según estadísticas de Google, la escuadra dirigida por Diego López no pudo traducir ese control en oportunidades ofensivas claras. El Nacional, por su parte, tampoco generó mucho peligro, registrando solo un remate al arco en los primeros 45 minutos. El desarrollo del juego fue interrumpido constantemente por faltas, acumulando un total de 18 infracciones entre ambos equipos, lo que contribuyó a un primer tiempo carente de ritmo y emociones .

La falta de profundidad en el ataque de Barcelona SC se evidenció en la ausencia de remates a puerta, a pesar de los esfuerzos de jugadores clave como Damián Díaz y Joao Rojas. El delantero Allen Obando también tuvo una participación limitada, siendo neutralizado por la defensa de El Nacional, especialmente por Daniel Patiño. La imprecisión en los pases y la falta de creatividad en la generación de jugadas ofensivas fueron factores determinantes en el bajo rendimiento del equipo durante la primera mitad. La afición presente en el estadio Monumental expresó su descontento ante la falta de propuestas ofensivas y la escasa emoción en el desarrollo del encuentro .

Por qué el réferi no detuvo la jugada pese a que David Cabezas estaba tumbado en el piso

En el polémico episodio del partido entre El Nacional y Barcelona SC, el árbitro no detuvo la jugada a pesar de que David Cabezas yacía en el suelo visiblemente afectado. La razón es sencilla pero firme en reglamento: el balón seguía en movimiento y no había una infracción clara que obligara al juez a interrumpir el juego. Según las reglas FIFA, solo se detiene el partido si hay una lesión grave o si el balón sale del terreno; en este caso, ni lo uno ni lo otro ocurrió. Por tanto, la responsabilidad de parar la acción recaía en los jugadores, no en el réferi.

Era Barcelona SC quien debía decidir si lanzar el balón fuera por sentido deportivo, reconociendo al rival en el piso. Pero optaron por continuar, siguiendo el criterio técnico y frío de que el juego no se había detenido por el árbitro. Así, la jugada avanzó y terminó en gol, encendiendo la polémica y el enojo del cuadro militar. La ética y el reglamento a veces marchan por sendas distintas, y esta jugada fue una muestra clara: la ley permitió continuar, pero el espíritu del juego pedía otra cosa.

El Nacional supo pararse bien en defensa a Barcelona SC

El Nacional mostró solidez táctica y madurez defensiva frente a Barcelona SC, neutralizando de manera efectiva los intentos ofensivos del equipo torero. Con una línea de cuatro bien plantada y apoyos constantes desde el mediocampo, el conjunto militar cerró los espacios por donde usualmente Damián Díaz y Joao Rojas generan peligro. La figura de Daniel Patiño se alzó como uno de los bastiones en defensa, imponiéndose en los duelos individuales y anticipando con precisión. Además, la presión alta e intermitente evitó que Barcelona tuviera salidas limpias, obligándolos a errores no forzados.

A lo largo del partido, especialmente en el primer tiempo, El Nacional logró desactivar por completo el circuito de ataque del rival. Barcelona no solo careció de profundidad, sino que se vio frustrado por la intensidad y orden del bloque defensivo criollo. El Nacional no se replegó por necesidad, sino por convicción táctica, sabiendo cuándo ceder terreno y cuándo recuperar el balón para transiciones rápidas. Fue un ejercicio de disciplina y lectura de juego que terminó dejando sin ideas a uno de los planteles más ofensivos del torneo.