Selección Ecuatoriana

El día que Jordy Caicedo saltó la pared con una televisión, “la policía me paró”

Jordy Caicedo reveló una anécdota que pocos conocen

Por Pedro Ortiz

Jordy Caicedo reveló una anécdota que pocos conocen
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Foto tomada de: Vistazo/Inmoimpakto/Definiciónde

Uno de los jugadores que se ha ganado a pulso su llamado a la Selección de Ecuador es el delantero Jordy Caicedo, que actualmente en Atlas de México, ha encontrado el lugar en el que puede destacar, por lo que se ha convertido en uno de los fijos de Félix Sánchez. El delantero, reveló una anécdota especial y poco conocida, en diálogo con los medios oficiales de La Tri.

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En un mano a mano con su compañero Hernán Galíndez, que se encargó de entrevistarlo y hacerle varias preguntas, el atacante contó lo que sucedió en una ocasión, mientras saltaba una pared con una televisión que le pertenecía y fue detenido por la policía.

“Puede ser que, una tarde y noche te hayan visto saltar una pared con un televisor en la mano”, preguntó Galíndez, a lo que Jordy contestó: “Es una historia fuera de contexto. No ve vieron, me cogieron con la televisión, suena raro, la gente pensaría que lo me estaba robando, pero no, era mía la televisión, fue mucha mala suerte”.

“Fue en mi época cuando vivía en el complejo de Universidad Católica, cuando recién llegué, con mis primeros sueldos me compré una televisión, para ver los partidos del fútbol ecuatoriano y porque me gusta mucho la TV. Después de unos meses, ya nos sacaron del complejo a los que teníamos salarios, yo tenía que ir a ver mis cosas; fue un domingo, tarde-noche, la puerta principal estaba cerrada y yo necesitaba mi televisor y un amigo me ayudó por la pared a sacarlo”, continuó relatando Jordy.

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¿Qué sucedió cuando se encontró con la policía?

Siguiendo con la anécdota, Caicedo concluyó: “Para mi mala suerte, iba pasando el carro de la policía y decía como le explico al policía que ese televisor era mío, yo en zapatillas y mi amigo pasándome el televisor. El policía me paró, no dudó dos veces, en decirme que pasa acá, treparme al carro a mí y mi amigo. Me salvó el guardia del complejo, él estaba ahí y sabía que el televisor era mío, sino otra hubiese sido la historia”.


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