Lo quería en el Mundial y Beccacece reveló el error que provocó que sancionen a Oscar Zambrano y no juegue por 12 meses
El entrenador contó en rueda de prensa: "fue por error de un profesional que no detalló el informe que debía para evitar esta suspensión"
El caso de Óscar Zambrano, el joven talento de Liga de Quito suspendido por dopaje, ha sido uno de los más comentados en el fútbol ecuatoriano. Tras una larga gestión legal para reducir su pena, el entrenador de la Tri, Sebastián Beccacece, ofreció una rueda de prensa en la que reveló la causa principal de la suspensión de 12 meses. Según el estratega argentino, la sanción no se debió a un engaño intencional del jugador, sino a un error administrativo crucial en el manejo de su caso.
La raíz del problema, según lo explicó Beccacece, fue la omisión o la falta de precisión en la documentación médica presentada ante los organismos deportivos. El entrenador indicó que el error provino de un "profesional que no detalló el informe que debía para evitar esta suspensión". Zambrano había ingerido un medicamento que contenía una sustancia prohibida (Clortalidona) para tratar una condición médica preexistente, pero al parecer, el equipo legal no respaldó adecuadamente esta defensa con la documentación clínica necesaria para justificar el uso terapéutico.
La falta de un informe detallado y debidamente justificado significó que, ante los ojos de la CONMEBOL, no existía una prueba clara de que la ingesta de la sustancia fuera involuntaria o médicamente necesaria bajo las normas de exención de uso terapéutico. Este fallo de un profesional ajeno al jugador transformó lo que podría haber sido un descargo rápido en una larga suspensión. El error demostró que, en el ámbito antidopaje, la transparencia y la rigurosidad en la presentación de informes son tan importantes como la defensa del propio jugador.
Aunque la sanción inicial que reportaron los medios era de 16 meses, el equipo jurídico de Liga de Quito logró que esta se redujera a 12 meses exactos tras agotar todas las instancias de apelación. Si bien esta reducción fue celebrada como una victoria legal, el hecho de que Zambrano haya perdido un año completo de su carrera —un periodo crítico en el desarrollo de un joven talento— es la consecuencia directa de la falla administrativa señalada por Beccacece, confirmando que la suspensión pudo haberse evitado por completo.
La suspensión de Óscar Zambrano ha tenido un impacto directo en su prometedora carrera, interrumpiendo su desarrollo en un momento clave y afectando su reciente paso al Hull City de Inglaterra. Las palabras de Beccacece, más allá de la crítica, enfatizan el costo que estos errores tienen para los futbolistas, quienes se convierten en víctimas de fallos en el manejo de sus expedientes. Zambrano pasó de ser una figura ascendente con proyecciones internacionales a un jugador inactivo, una pérdida significativa para él y para el club dueño de sus derechos.
