Félix Sánchez Bas ya no debe ser el entrenador de Ecuador, la altura es su enemigo

Es fácil hablar después de cada partido pero el martes ni la altura fue nuestra aliada. Siempre he dicho que la altura puede llegar a ser un factor que puede ayudarnos, siempre y cuando, el equipo beneficiado haga las tareas dentro del campo de juego. Félix Sánchez Bas no solamente no ha entendido esto sino que, hasta el momento, no logró dar una identidad de juego a su equipo; y eso que no hablamos de las fallas en sus convocatorias y en los cambios que realiza en cada partido

Ya lo mencioné antes, no entiendo el motivo por el cuál el entrenador español insiste con la línea de tres defensores envés de prescindir de uno de ellos y apostar por un volante creativo. Más aún, si Ecuador juega de local y con probablemente la mejor generación de futbolista de su historia,

En la rueda de prensa posterior al empate contra Colombia, Sánchez Bas admitió que no sacó un defensor porque tuvo miedo de perder. Un director técnico así simplemente no sirve para la selección ecuatoriana. El martes fue más que evidente que faltó un volante creativo que acompañe a Kendry Páez que durante todo el cotejo se puso el equipo al hombro a nivel ofensivo.

La alineación era sencilla. En la defensa estaba bien Jhoanner Chavez, a la izquierda, Angelo Preciado en banda derecha, en el centro ubicábamos a Félix Torres y Piero Hincapié. En la mitad de la cancha junto a la presencia de Moisés Caicedo no era necesario Carlos Gruezo sino Dixon Arroyo, que debido a lo que ha mejorado en su fútbol, también te aporta una visión ofensiva, pero Sánchez no lo convoca; en el centro, por ejemplo, Junior Sornoza, por derecha Kendry Páez, por izquierda Kevin Rodríguez y arriba Enner Valencia o Jordy Caicedo.

No es que yo me crea director técnico pero se debe usar la lógica. Ecuador es un equipo que realiza muchos pases intrascendentes hacia atrás o hacia los costados y eso se debe a que nuestra selección no tiene a ese jugador diferente en el campo. Kendry, debido a las decisiones del entrenador, está solo en la cancha. Hasta ahora, Sánchez es una frustración en la selección y si seguimos así, estamos destinado al fracaso.