Con Antonio Álvarez están en la olla y este campeón con Barcelona SC se ofreció para ser presidente

Barcelona Sporting Club ha enfrentado en los últimos años una constante turbulencia institucional, especialmente bajo la actual administración del presidente Antonio Álvarez (o la junta directiva vigente que lo respalda). Las polémicas financieras, las denuncias, los problemas legales con la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) y los recurrentes fracasos deportivos han generado un ambiente de descontento entre los socios e hinchas. La percepción general de que el club está "en la olla" (en graves problemas) ha abierto la puerta a que nuevas figuras se ofrezcan a tomar el timón.

En medio de este panorama de crisis, una figura icónica y querida por la afición ha levantado la mano para postularse a la presidencia en el futuro: el exarquero y multicampeón con el club, Máximo Banguera. Conocido por su carisma y sus atajadas heroicas, Banguera es una figura con la suficiente conexión emocional con la hinchada para ser considerado un candidato serio en próximas elecciones, buscando capitalizar el deseo de cambio.

El propio exarquero hizo pública su ambición en una entrevista con el diario EL UNIVERSO. Banguera no dudó en expresar su deseo de liderar a la institución: "Me gustaría ser presidente de Barcelona SC". Esta declaración directa y sin tapujos dejó claro que su compromiso con el 'Ídolo' no terminó con su retiro de las canchas, sino que se extiende al ámbito dirigencial.

Banguera también enfatizó su total disposición y compromiso para asumir cualquier rol que el club necesite. "Donde requiera yo voy a estar con la predisposición 'para poderlo hacer sin ningún problema'", afirmó. Este mensaje busca transmitir a los socios que él no está ofreciendo una candidatura caprichosa, sino una voluntad genuina de trabajar por el bien de la institución, basándose en la ética de trabajo y el liderazgo que mostró en el campo.

El principal activo de Máximo Banguera es su profundo capital emocional y su legitimidad deportiva. Al ser un jugador formado en el club y parte de dos campeonatos históricos, su figura contrasta fuertemente con la dirigencia actual, que es vista por muchos como desconectada de los valores deportivos. La hinchada podría ver en Banguera una opción de "volver a las raíces" y recuperar la mística que sienten se ha perdido.

Si bien el anhelo de Banguera es legítimo y su base de apoyo popular es grande, el desafío será transformar su carisma deportivo en credibilidad dirigencial y política. Deberá demostrar que puede formar un equipo de trabajo sólido, manejar las finanzas complejas de un club con deudas históricas y competir contra las estructuras políticas y económicas que dominan las elecciones de Barcelona SC. La presidencia requiere experiencia administrativa, algo que 'Manotas' tendrá que compensar con una gestión impecable.