El club de Premier League al que LDU le quitó Lucas de Lima Tagliaprieta y terminó siendo un tronco
Liga de Quito pagó 1 millón por el defensor que fue de los peores fichajes en el último tiempo
En el mercado de fichajes de 2017, Liga Deportiva Universitaria de Quito (LDU) consiguió lo que en su momento fue visto como un gran golpe: asegurarse la contratación del defensor brasileño-italiano Lucas de Lima Tagliapietra. El fichaje se convirtió en un motivo de orgullo para la dirigencia y la hinchada, pues el club ecuatoriano logró arrebatarle el jugador al Fulham de Inglaterra, un club con mayor poderío económico que militaba en el Championship (la segunda división inglesa) con claras aspiraciones de ascender a la Premier League.
El Fulham veía en Lucas de Lima una opción para reforzar su defensa de cara a su proyecto de ascenso. El hecho de que un equipo de la Championship, a un paso de la Premier League, se fijara en él, validaba la calidad del jugador en el fútbol europeo, donde venía de jugar en el Boavista de Portugal. LDU tuvo que ofrecer un contrato a largo plazo (cuatro años) para convencer al defensor de elegir la aventura sudamericana sobre la opción inglesa.
La llegada de Lucas de Lima a la Casa Blanca generó grandes expectativas, especialmente por el historial de la disputa con el Fulham. Sin embargo, su rendimiento en el campo de juego fue una gran decepción. El defensor nunca logró consolidarse ni mostrar la solidez esperada para un zaguero con experiencia europea. Fue propenso a errores en la marca y no se adaptó al ritmo y la intensidad de la Liga Pro, defraudando a la afición que esperaba a un pilar defensivo.
La frustración con el desempeño de Lucas de Lima fue tal que, en el lenguaje popular de la hinchada ecuatoriana, el jugador fue calificado con el peyorativo término de "tronco". Este apodo se utiliza para describir a un futbolista de movimientos lentos, con poca agilidad y escasa técnica. La victoria de LDU en el mercado, arrebatándole el fichaje a un club inglés, se convirtió en una "victoria pírrica", pues el resultado en la cancha fue un jugador que no cumplió con las expectativas.
La gran ironía del fútbol es que, con el paso del tiempo, la "derrota" en el fichaje de Lucas de Lima resultó ser una bendición disfrazada para el Fulham. El club inglés se ahorró un salario importante y evitó la incorporación de un jugador que, en el contexto ecuatoriano, fue considerado un fracaso. Mientras LDU lamentó la inversión, el Fulham pudo haber utilizado esos recursos en un defensor que sí los ayudó a ascender a la Premier League.