Emelec se cae a pedazos, no pagan sueldos y dos jugadores mejor se fueron en silencio
El cuadro Millonario tiene novedades con su plantel, dos elementos dijeron adiós
La situación institucional y económica del Club Sport Emelec ha alcanzado un punto crítico, afectando gravemente la estabilidad de su plantilla profesional. Los problemas financieros del equipo eléctrico, que arrastra deudas y arranca demandas de exjugadores, han derivado en el incumplimiento reiterado del pago de salarios, creando un clima de profunda incertidumbre y malestar entre los futbolistas.
Esta inestabilidad económica ha tenido consecuencias directas y muy sensibles en la plantilla, llevando a varios jugadores a buscar soluciones por cuenta propia. La situación se agrava con la confirmación de que dos elementos del equipo han optado por rescindir sus contratos y abandonar la institución, como respuesta directa a los continuos impagos por parte de la dirigencia.
Los jugadores que han tomado la drástica decisión de marcharse son Elkin Muñoz y Marcos Cuero. Si bien Elkin Muñoz es un joven que se había destacado como una promesa de las formativas azules, su salida, al igual que la de Marcos Cuero, subraya el quiebre de la relación contractual provocado por la falta de cumplimiento en las obligaciones salariales, priorizando su estabilidad económica y profesional sobre la permanencia en el club.
La salida de estos jugadores es solo una manifestación externa de la crisis que vive el camerino. Recientemente, los problemas de pago han escalado hasta el punto de que la plantilla completa, encabezada por sus capitanes, tuvo que tomar medidas extremas, como declararse en paro y negarse a entrenar. El reclamo público de los futbolistas denunció retrasos que, en algunos casos, superaban los siete u ocho meses sin recibir su sueldo.
Este escenario de impagos crónicos y la consecuente fuga de talentos, como en el caso de Muñoz y Cuero, ilustra que el Emelec se está "cayendo a pedazos" a nivel institucional. La dirigencia se enfrenta a un desafío mayúsculo, no solo para regularizar las deudas millonarias con el plantel y exjugadores, sino para reconstruir la confianza y evitar que más figuras opten por marcharse ante la insostenible falta de respeto a sus condiciones laborales.
La decisión de Elkin Muñoz y Marcos Cuero de dejar Emelec es un síntoma alarmante de la profunda crisis económica que atraviesa el club. Las promesas incumplidas y la ausencia de salarios han deteriorado el ambiente, obligando a los jugadores a priorizar su futuro. Si la dirigencia no logra estabilizar las finanzas y garantizar los pagos a tiempo, corre el riesgo de ver una desbandada mayor que comprometería seriamente su futuro deportivo en la LigaPro.