Liga de Quito le ganó al último minuto e IDV aún no es campeón, Claudio Spinelli reveló lo que pasó en el camerino

El Pájaro tenía la intención de dar la vuelta en Casa Blanca, sin embargo se quedaron con las ganas

Claudio Spinelli / Foto: API
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El enfrentamiento entre Liga de Quito e Independiente del Valle (IDV) se definió de manera dramática y agónica, con un gol de LDU en el último minuto que selló la victoria 2 a 1. Este resultado fue un duro golpe para el equipo rayado, ya que les impidió asegurar el campeonato en ese momento y prolongó la definición del título, afectando profundamente el ánimo del plantel.

Tras el doloroso revés, el delantero argentino de IDV, Claudio Spinelli, fue uno de los encargados de compartir la atmósfera que se vivía en el vestuario. El jugador reveló que el impacto de la derrota, especialmente por la forma en que se dio, dejó a sus compañeros "bastante tocados" emocionalmente. La frustración era palpable al ver cómo el triunfo se les escapó en los segundos finales.

Spinelli describió con detalle lo que sucedió una vez que el equipo ingresó al camerino, dejando una imagen sombría del vestuario campeón. El ambiente estaba dominado por un silencio sepulcral, algo inusual en un grupo acostumbrado a celebrar victorias y a mantener alta la moral. Este mutismo reflejó la magnitud de la decepción tras caer ante un rival directo y ceder puntos claves en la lucha por el campeonato.

El delantero continuó explicando que los jugadores de Independiente del Valle se sentían "golpeados por la derrota". No era solo una pérdida de puntos, sino la sensación de que el esfuerzo de todo el partido se había desvanecido en el momento más inoportuno. La bronca por el resultado adverso contra LDU, sumada a la posibilidad perdida de ser campeones, creó un clima de gran pesar en el grupo.

A pesar de la tristeza y el golpe anímico, la revelación de Spinelli también apunta a la alta exigencia y el carácter competitivo que tiene el plantel de IDV. El hecho de que una derrota provoque tanto dolor y silencio en el camerino subraya la mentalidad ganadora del equipo, donde un traspié, incluso uno agónico, se siente como un fracaso momentáneo que debe ser superado rápidamente.

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La derrota de IDV por 2 a 1 ante Liga de Quito en el último suspiro generó un profundo impacto emocional en el plantel. Claudio Spinelli confirmó que el camerino estaba "bastante tocado", marcado por el silencio y la frustración de los jugadores. Este ambiente sombrío evidenció el duro golpe anímico que sufrieron los Rayados del Valle al ver frustrada, temporalmente, su posibilidad de coronarse campeones.

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