Los hinchas lo están criticando y ahora la drástica decisión que habría tomado Guillermo Duró con Alfonso Barco

La expectación por el debut de Guillermo Duró como nuevo director técnico de Emelec es palpable, y las primeras decisiones del estratega argentino ya comienzan a generar debate. Para el crucial enfrentamiento de Liga Pro contra Manta, Duró habría optado por una movida táctica que reubica a un jugador clave: Alfonso Barco, mediocampista de corte, sería utilizado como defensa central debido a las múltiples bajas por lesión en esa posición.

Esta decisión, aunque sorpresiva para algunos, es una clara muestra de la adaptabilidad y las soluciones de emergencia que Duró busca implementar ante la compleja situación de la plantilla. La plaga de lesiones en la zaga central ha obligado al nuevo técnico a mover sus piezas, y la versatilidad de Barco parece ser la respuesta elegida para brindar solidez defensiva en este importante estreno.

Alfonso Barco (nacido el 26 de agosto de 2001 en Lima, Perú), llegó a Emelec con el perfil de un mediocampista central, un "cinco" con capacidad para la recuperación de balón y la distribución de juego. Sin embargo, su trayectoria ha demostrado que posee cualidades que le permiten desempeñarse en diferentes roles, una característica que ahora Duró busca explotar en la última línea.

La carrera de Barco comenzó en las divisiones inferiores de importantes clubes peruanos. Su debut profesional se dio con Universitario de Deportes, uno de los equipos más grandes de Perú, donde rápidamente se destacó por su despliegue físico, su buen posicionamiento y su capacidad para cortar jugadas. En Universitario, alternó entre el mediocampo y, ocasionalmente, la defensa, lo que le brindó una experiencia valiosa en distintas facetas del juego.

Su desempeño en el fútbol peruano le valió ser considerado en selecciones juveniles de su país, donde también demostró su valía. La proyección de Barco llamó la atención de clubes internacionales, lo que eventualmente lo llevó al fútbol ecuatoriano para unirse a las filas de Emelec.

En el "Bombillo", Alfonso Barco ha buscado consolidarse como el mediocampista de contención que el equipo necesita. Su llegada fue pensada para reforzar la mitad de la cancha, aportando equilibrio y fuerza en la recuperación. No obstante, las circunstancias actuales del equipo han puesto a prueba su adaptabilidad. Con lesiones en la defensa central que limitan las opciones de Guillermo Duró, la reubicación de Barco como zaguero central no solo responde a una necesidad, sino que también es un voto de confianza en su capacidad para interpretar una nueva posición.

Este cambio táctico para el partido contra Manta será crucial. La solidez defensiva será fundamental para que Emelec inicie con pie derecho la era Duró. La experiencia de Barco en el mediocampo, su lectura de juego y su buen trato del balón podrían ser atributos valiosos para una defensa que busca orden y una salida limpia. El ojo del nuevo técnico está puesto en aprovechar al máximo las cualidades de sus jugadores, y la reubicación de Alfonso Barco es una clara señal de ello en su debut.