Mientras Christian Cueva tiene contrato, el histórico de Emelec que podría dejar el equipo por bajo rendimiento
El equipo eléctrico ya estaría armando el plantel para el otro año, donde esperan tener más protagonismo
Mientras el tema contractual y el bajo rendimiento de Christian Cueva generan una incertidumbre palpable en Emelec, otro histórico del club, el delantero Jaime Ayoví, se encuentra en el ojo del huracán por razones similares: su aporte al equipo ha disminuido notablemente, despertando rumores sobre una posible salida prematura a pesar de tener contrato vigente. Su situación es un doloroso reflejo de cómo el peso de los años y la exigencia del fútbol de élite pueden afectar incluso a los grandes ídolos.
La "Yoya", que renovó su vínculo con el equipo hasta diciembre de 2025, ha visto cómo su rendimiento en la actual temporada no se acerca al nivel que mostró en sus etapas anteriores con el Bombillo o en la Selección Ecuatoriana. Con 37 años de edad, el desgaste físico es evidente. El jugador, que en su momento fue sinónimo de potencia, velocidad y gol, ahora lucha por imponerse en los duelos, mostrando una disminución en su explosividad y una menor contundencia frente al arco rival.
Esta baja en su desempeño ha coincidido con una etapa complicada para Emelec, un factor que exacerba las críticas de la hinchada. El club, que atraviesa una crisis deportiva y financiera, necesita más que nunca que sus referentes marquen la diferencia. El contraste entre la gran expectativa generada por su renovación a finales de 2024 y la realidad de sus números en 2025 (pocos goles y minutos de juego) ha convertido a Ayoví en un blanco de la frustración de la afición.
Los rumores de una posible desvinculación o retiro han tomado fuerza en el entorno del equipo. Aunque Ayoví ha expresado su amor incondicional por Emelec y su disposición a acatar cualquier decisión dirigencial, sus palabras se han interpretado como una señal de que está consciente de su situación y abierto a un paso al costado si eso beneficia al club. "Si me toca salir, que sea por el bien de Emelec", declaró el jugador en una ocasión, dejando la puerta abierta.
La llegada de nuevos fichajes y la necesidad de liberar cupos y masa salarial en medio de la crisis financiera de Emelec ponen su puesto en riesgo. Un jugador histórico con un salario considerable, que además ocupa un espacio en la plantilla, se vuelve insostenible si su rendimiento no justifica la inversión. La dirigencia, presionada por los resultados y las finanzas, podría verse obligada a negociar su salida antes de que finalice su contrato a finales de 2025.
La situación de Jaime Ayoví es el reverso de la medalla de los fichajes fallidos y un recordatorio de que la edad es implacable en el deporte. A pesar de su trayectoria y su estatus de ídolo, el bajo rendimiento en el campo, sumado a la crisis institucional de Emelec, ha puesto al histórico delantero en una posición precaria. La pregunta no es si el club puede prescindir de su talento, sino si el delantero puede dar el paso de honor y salir por la puerta grande antes de que la exigencia del club termine por opacar su legado.
