¿Solo porque es Barcelona SC? El VAR perjudicó a Libertad en una jugada polémica en el Monumental
Parece que el peso de la camiseta del Ídolo está más latente que nunca
El enfrentamiento entre Barcelona SC y Libertad en el Estadio Monumental no solo dejó un resultado deportivo, sino también una nueva y acalorada polémica arbitral que ha reavivado el debate sobre la influencia del VAR en la LigaPro. Una jugada puntual, protagonizada por el extremo Janner Corozo y un delantero de Libertad, ha provocado un torrente de críticas y la sensación, entre los afectados, de que el arbitraje se inclinó a favor del equipo local, repitiendo el recurrente cuestionamiento: ¿sólo por ser Barcelona SC?
El momento de la controversia se centró en una acción defensiva de Janner Corozo. Tras un rechace dentro del área, el jugador de Barcelona tuvo contacto con el atacante de Libertad de una manera considerada por muchos como intencional y antirreglamentaria. La acusación principal se basa en que Corozo habría golpeado con el pie al jugador rival, en lugar de impactar únicamente el balón, lo que constituiría una falta merecedora de la pena máxima, desatando la protesta airada del equipo visitante.
La jugada, al ser una potencial infracción dentro del área, fue inmediatamente revisada por el Árbitro Asistente de Video (VAR). Tras varios minutos de análisis y expectativa, la herramienta tecnológica se comunicó con el árbitro central. Sin embargo, y a pesar de las imágenes que sugerían el contacto entre Corozo y el delantero de Libertad, el central decidió mantener su postura original y no dictar la pena máxima. Esta decisión, con el VAR de por medio, aumentó la frustración del cuerpo técnico y jugadores de Libertad.
Para el equipo de Libertad, la omisión de la sanción penal representó un claro perjuicio en un momento clave del partido. La polémica no se enfocó tanto en un error de apreciación del árbitro, sino en la interpretación final de una jugada que el VAR tuvo la oportunidad de corregir, pero que decidió avalar la decisión de campo. Esta situación alimenta la narrativa de que el arbitraje, consciente o inconscientemente, tiende a favorecer a los clubes grandes en situaciones dudosas, especialmente jugando como local en su escenario principal.
El eje de la discusión arbitral se centró en la 'intencionalidad' y la 'temeridad' en la acción de Janner Corozo. Mientras el equipo de Libertad argumentaba que el golpe fue deliberado y negligente, poniendo en riesgo la integridad del jugador, el criterio final del VAR y del central pareció priorizar que el contacto principal se daba en el rechazo del balón o que el golpe al rival no era suficiente para decretar la falta, ignorando la posición y el movimiento del pie del jugador de Barcelona.
