Solo Vítor Roque cuesta más que todo el plantel de Liga de Quito pero Adé lo dominó en Casa Blanca

El delantero brasileño vale millones pero en Casa Blanca no hizo nada, pasó desapercibido

Liga de Quito / Foto: ESPN
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El reciente enfrentamiento entre Liga de Quito y Palmeiras por la semifinal de la Copa Libertadores puso de manifiesto un abismo económico pocas veces visto en esta instancia, pero que fue completamente anulado en el campo de juego. El ejemplo más claro de esta disparidad es el delantero brasileño Vítor Roque, cuyo valor individual, estimado en $20 millones de dólares (según la información citada), supera por sí solo la tasación total de toda la plantilla de LDU, que rondaría los $18 millones.

Esta diferencia de más del 100% en el valor de mercado ilustra el inmenso poderío financiero de los clubes brasileños, con Palmeiras a la cabeza, en contraste con la estructura económica de los equipos ecuatorianos. El hecho de que un solo jugador, Vítor Roque (quien recientemente se unió al Verdão proveniente del Athletico Paranaense), valga más que el plantel completo de un rival en semifinales, subraya la magnitud del desafío que enfrentó Liga.

Sin embargo, el fútbol demostró una vez más que el dinero no juega. A pesar de ser la figura más valiosa en el campo, Vítor Roque fue completamente neutralizado por la defensa de LDU, especialmente por el central haitiano Ricardo Adé. El experimentado defensor se encargó de dominar el área y limitar cualquier espacio al joven y talentoso delantero, quien no pudo desequilibrar ni generar peligro real en el Estadio Rodrigo Paz Delgado.

El duelo individual entre Adé y Roque se convirtió en un símbolo del triunfo de la organización y el temperamento sobre la chequera. La marcación férrea y la anticipación de Adé, un defensor que se ha consolidado como líder en la zaga Alba, desdibujaron al atacante brasileño, impidiéndole exhibir la velocidad y la potencia que lo hacen un jugador tan cotizado a nivel mundial.

La goleada 3-0 de Liga de Quito no solo fue una victoria en el marcador, sino una contundente declaración: la calidad individual y el alto valor de mercado de los futbolistas brasileños no son garantía de éxito ante un equipo compacto y tácticamente superior. Adé y sus compañeros de LDU demostraron que el espíritu colectivo, la garra y el conocimiento de su localía son herramientas poderosas que nivelan cualquier diferencia económica.

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La actuación de Ricardo Adé dominando al "jugador de $20 millones" fue un resumen perfecto de lo ocurrido en Casa Blanca. Liga de Quito demostró que en el fútbol sudamericano la jerarquía se construye con estrategia y corazón, no solo con cifras millonarias, logrando un triunfo épico que reivindicó la pasión y la capacidad del fútbol ecuatoriano ante la hegemonía financiera brasileña.

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