(VIDEO) La reacción de Joao Rojas cuando un periodista le preguntó a Rescalvo porque no saca a Janner Corozo
El entrenador español y el delantero ecuatoriano acudieron a la rueda de prensa tras el empate ante LDU
La tensión que se vive en los banquillos de los equipos grandes, especialmente tras resultados adversos o rendimientos cuestionables, se hizo palpable durante una conferencia de prensa. En esta ocasión, el foco de la incomodidad no recayó solo en el entrenador, sino también en uno de sus jugadores estrella, Joao Rojas. El momento cumbre ocurrió cuando un periodista, con una pregunta directa y punzante, interrumpió la dinámica habitual, desatando una reacción visiblemente emocional en el atacante.
La pregunta que detonó la situación fue dirigida al director técnico, Ismael Rescalvo, y apuntaba a una decisión táctica delicada: "¿Por qué no saca a Janner Corozo?" Esta interpelación, que cuestiona abiertamente la permanencia de un compañero en el campo, sugiere una crítica al rendimiento del futbolista en cuestión y, por extensión, al criterio del entrenador. Este tipo de preguntas son comunes en el periodismo deportivo, pero su impacto emocional puede ser profundo en el camerino.
La reacción de Joao Rojas, quien se encontraba al lado del técnico Rescalvo, fue inmediata y demostró su completo desacuerdo con el planteamiento del periodista. Su lenguaje corporal habló más que mil palabras: "No lo podía creer". El gesto de asombro y el visible enojo ante la insinuación de que un compañero debía ser sustituido o cuestionado públicamente, reflejó la camaradería y la sensibilidad del grupo ante la crítica externa.
La frustración de Rojas se manifestó en una serie de gestos que evidenciaron su malestar. Primero, negó con la cabeza, un movimiento claro de rechazo a la premisa de la pregunta. Este gesto fue una señal de que, para él, el señalamiento a un solo jugador no era justo o no reflejaba la realidad interna del equipo. El atacante defendió, sin palabras, la unidad del plantel ante la presión mediática.
Finalmente, la emoción se intensificó, llevando a Rojas a un gesto de visible agotamiento mental y frustración: "luego se puso las manos sobre la cara". Este acto es universalmente reconocido como una manifestación de fastidio, pena o impotencia. En ese momento, la presión del resultado, la intensidad de la crítica pública y la incomodidad de la pregunta sobre un compañero se conjugaron, llevando al jugador a un quiebre emocional en el estrado.
Barcelona SC
El incidente, más allá de la pregunta en sí, ilustra la alta presión a la que están sometidos los futbolistas y entrenadores de un equipo grande. La reacción de Joao Rojas sirvió como un espejo del sentir interno del plantel ante la crítica selectiva, mostrando que la unidad del grupo y la defensa de un compañero son prioridades, incluso en momentos de alta tensión mediática. Su frustración fue un testimonio del costo emocional de la exposición pública en el deporte de élite.
