Ya hasta fue arquero en LDU y ahora mira la nueva posición en la que se atrevió a jugar Ricardo Adé ante Libertad

El defensor haitiano Ricardo Adé, conocido por su sólida trayectoria como defensa central en la zaga de Liga de Quito, sorprendió a propios y extraños durante el partido contra Libertad al atreverse a jugar en una posición completamente nueva para él. Adé, quien ya había tenido un paso breve y recordado como arquero de emergencia en un partido anterior debido a una serie de expulsiones, demostró su polivalencia y compromiso con el equipo al ocupar una ubicación inusual en el esquema táctico.

Durante el cotejo, el cuerpo técnico de LDU optó por una variación táctica que colocó a Ricardo Adé, un zaguero de gran envergadura física, en el rol de lateral derecho. Esta decisión es sumamente atípica para un jugador con sus características, ya que la posición de lateral demanda una alta velocidad, despliegue físico constante y una clara vocación ofensiva por la banda, habilidades que tradicionalmente se asocian menos con un central. Su rol pasó a ser más de contención que de proyección.

La movida táctica generó una cascada de cambios en la defensa. José "El Choclo" Quintero, quien es el lateral derecho habitual del equipo albo y conocido por su velocidad y constantes subidas al ataque, fue retrasado en el campo. Al ceder su posición en la banda a Adé, Quintero fue ubicado en una zona más conservadora, probablemente como un lateral más de apoyo o, incluso, asumiendo un rol más parecido al de un carrilero retrasado que brinda seguridad a la línea de tres o de cuatro defensores.

La reorganización de la línea defensiva se completó con la ubicación de Carlos Gruezo en la posición de defensa central. Es importante destacar que Carlos Gruezo es predominantemente un mediocampista de contención, un "5" o volante central. Colocar a un mediocampista de corte en la zaga central es una señal de que el entrenador buscaba mayor salida de balón y organización desde el fondo, aprovechando la inteligencia táctica de Gruezo, aunque sacrificando quizás la velocidad pura de un central.

Esta serie de movimientos tácticos, que colocaron a Adé de lateral, Quintero retrasado, y Gruezo de central, indica que el entrenador de LDU estaba buscando una solución de emergencia o una variante táctica muy específica para contrarrestar el ataque de Libertad. La polivalencia de Ricardo Adé (quien demostró poder jugar en diversas posiciones, incluyendo el arco en una ocasión anterior) fue crucial para habilitar estos cambios, permitiendo al equipo mantener el orden defensivo a pesar de la ausencia de especialistas en sus posiciones naturales.

La decisión de utilizar a Adé como lateral derecho en el partido contra Libertad, junto con el reajuste posicional de Quintero y Gruezo, demuestra la flexibilidad y adaptabilidad que el cuerpo técnico busca en la plantilla. Aunque Adé es un central probado, su disposición a ocupar la banda derecha en un momento de necesidad táctica subraya el espíritu de sacrificio. Este tipo de experimentos posicionales se convierten en herramientas valiosas para el equipo al enfrentar rivales con diferentes características ofensivas o en momentos de baja por lesión.

¿Le gustaría que le recuerde el contexto de cuando Ricardo Adé tuvo que jugar como arquero en LDU?