Emelec le ganó al Cuenca con contundencia en el Capwell, pero esto le reclamaron los hinchas a Jorge Guzmán

La victoria contundente de Emelec en el Estadio George Capwell sobre Deportivo Cuenca marcaba el inicio del segundo hexagonal de la LigaPro con una nota positiva en lo deportivo. Sin embargo, la euforia por los puntos obtenidos fue rápidamente opacada por una crisis institucional que ya venía gestándose. Mientras el equipo celebraba en la cancha, en las redes sociales y entre la afición, el principal foco de atención no era el resultado, sino la situación económica del club y las deudas con sus futbolistas.

El blanco de las críticas y reclamos fue el presidente del club, Jorge Guzmán. El malestar de la hinchada "eléctrica" se canalizó públicamente debido a una tensa confrontación de declaraciones entre la dirigencia y la plantilla de jugadores días antes del encuentro. Los futbolistas habían emitido un duro comunicado detallando los meses de salarios pendientes, mientras que Guzmán intentaba minimizar la gravedad de la situación, lo que solo avivó la indignación.

El punto de quiebre fue la drástica medida que el plantel tomó antes del partido contra Deportivo Cuenca: negarse a concentrar. Esta acción fue una respuesta directa a las declaraciones de Jorge Guzmán, quien afirmó que la deuda salarial correspondía a un lapso mucho menor de lo que los jugadores aseguraban. Los futbolistas, incluido Christian Cueva, habían dejado claro que no entrenarían ni concentrarían si no se les pagaba, señalando que la falta de pagos llegaba a oscilar entre los dos y los ocho meses de atraso para algunos miembros del equipo.

A pesar de que el presidente Guzmán se reunió con el plantel para supuestamente calmar los ánimos y afirmó que las relaciones estaban "totalmente fluidas" y que se había "cancelado una parte", los jugadores rápidamente desmintieron estas aseveraciones a través de comunicados en redes sociales. El plantel calificó las declaraciones del dirigente como "falsas" y una "falta de respeto", exigiendo que se honrara la dignidad del futbolista y se pusieran al día con las obligaciones contractuales reales.

Este quiebre institucional resonó profundamente entre los aficionados, quienes tomaron las redes sociales para exigir acción al presidente. Los hinchas del "Bombillo" entendieron que el esfuerzo de la victoria se había logrado a pesar de las adversidades internas y no gracias a la gestión administrativa. El clamor popular se centró en la necesidad de "pagar lo que se debe" y dejar de "manipular la verdad" sobre la crisis, priorizando la estabilidad financiera por encima de los triunfos momentáneos.

La victoria deportiva contra Deportivo Cuenca no pudo ocultar la crisis económica y de confianza que vive Emelec bajo la dirigencia de Jorge Guzmán. La afición demostró que la lealtad al club exige no solo resultados en el campo, sino también responsabilidad y transparencia fuera de él. El reclamo de los hinchas en las redes sociales fue un claro ultimátum al presidente para que cumpla con los sueldos atrasados y devuelva la tranquilidad al camerino, garantizando el respeto que merecen los profesionales que defienden la camiseta azul y plomo.