Damián Díaz creó su equipo en Segunda y no le fue nada bien, mira en qué puesto quedaron
El cuadro del Kitu, Dreamers FC, fue penúltimo con 11 puntos a 8 del primero, Luz Valdivia
La carrera de Damián Díaz ha estado marcada por la magia, los títulos y la gloria en Barcelona Sporting Club, donde se convirtió en un ídolo indiscutible. Sin embargo, su incursión en una nueva faceta, la de ser dueño y gestor de un club de fútbol, ha presentado un desafío completamente diferente. En este nuevo rol, el "Kitu" ha tenido que enfrentar la dura realidad de las divisiones inferiores del fútbol ecuatoriano, un mundo alejado de los grandes estadios y los reflectores de la Serie A.
El icónico "10" del Ídolo se aventuró a crear su propio equipo, el Dreamers FC. Este proyecto deportivo, impulsado por su visión y pasión por el fútbol, nació con el objetivo de competir en la Segunda Categoría de la provincia de Guayas, una de las ligas más competitivas del país. La intención era clara: darles una oportunidad a jóvenes talentos y, con suerte, ascender de categoría.
A pesar de la ambición y el nombre detrás del proyecto, la primera temporada de Dreamers FC en la Segunda Categoría no fue la esperada. El equipo del "Kitu" tuvo un rendimiento muy por debajo de las expectativas, demostrando que el éxito en el campo de juego como futbolista no siempre se traduce en un éxito inmediato como directivo o gestor.
Al final del torneo, el equipo de Damián Díaz no logró consolidarse y se ubicó en una posición muy baja en la tabla de posiciones. La realidad es que a Dreamers FC no le fue nada bien, y su desempeño en la cancha reflejó las dificultades de competir en una división tan compleja y con menos recursos.
Los resultados no mienten. El cuadro del "Kitu" terminó en el penúltimo lugar de la tabla de posiciones. Este puesto, muy alejado de la cima y de los puestos de clasificación a la siguiente etapa, fue un duro golpe para el proyecto de Díaz y para los jóvenes jugadores que formaban parte del plantel.
La distancia con el líder de la tabla, Luz Valdivia, fue abismal. Mientras el equipo de Díaz apenas logró acumular 11 puntos a lo largo del campeonato, el equipo que terminó en la primera posición se fue con 8 puntos de ventaja. Esta brecha en la puntuación es un claro indicio de la brecha futbolística y de la dificultad que tuvo Dreamers FC para competir de igual a igual con los otros equipos de la categoría.
El fracaso deportivo de Dreamers FC en su primera incursión en la Segunda Categoría es una muestra de lo complicado que es gestionar un club de fútbol, incluso con una figura tan reconocida como Damián Díaz al frente. La falta de resultados subraya que la inversión y el talento en el campo son solo una parte de la ecuación; la planificación, la estructura y la experiencia administrativa son igual de cruciales.
En resumen, la aventura de Damián Díaz como dueño de un equipo en Segunda Categoría no ha tenido el comienzo soñado. Su proyecto, Dreamers FC, terminó en el penúltimo lugar con 11 puntos, muy por debajo de las expectativas. Un duro aprendizaje para el "Kitu", que ha pasado de ser un ganador nato en la cancha a enfrentar los desafíos de la gestión deportiva en la vida real.