(VIDEO) Fue un muro ante Sao Paulo y silenció el Morumbí, esto dijo Gonzalo Valle tras pasar a semis de Libertadores
Liga de Quito tuvo a Valle como su gran figura, en zona mixta dijo que hay que sufrir para llegar a estas instancias y sueña con la final
La clasificación de Liga de Quito a las semifinales de la Copa Libertadores se escribió con el temple de un guerrero y la seguridad de un arquero. En el épico duelo contra São Paulo en el Morumbí, la figura de Gonzalo Valle emergió como el héroe indiscutible, un muro impenetrable que frustró cada intento brasileño. Tras sellar la gesta, el portero ecuatoriano se presentó en zona mixta, donde sus palabras reflejaron la madurez y la humildad de un deportista que entiende la esencia del fútbol copero.
Valle, que había sido el foco de atención por sus atajadas providenciales a lo largo de toda la eliminatoria, demostró que para alcanzar la gloria continental, el camino está inevitablemente marcado por el sufrimiento. En sus declaraciones, el arquero reconoció la dureza de la instancia y la presión ejercida por el equipo rival. Su mensaje fue una aceptación tácita de que los grandes logros no llegan por comodidad, sino a través de la resistencia: "Hay que sufrir para llegar a estas instancias".
El portero de la "U" resumió la intensidad del partido, donde Liga de Quito tuvo que apelar a una defensa férrea y a la contundencia para contrarrestar el volumen de ataque del equipo paulista. La frase de Valle validó la estrategia pragmática del equipo albo, que privilegió el resultado sobre la estética. La mística copera de LDU se basa en la capacidad de soportar la tormenta, y el guardameta fue la encarnación de esa resistencia inquebrantable.
A pesar de la euforia del momento y de haber silenciado a un estadio histórico, Gonzalo Valle se mantuvo enfocado en el gran objetivo. Con la humildad que lo caracteriza, el portero miró hacia adelante y confesó que el sueño continental sigue más vivo que nunca. El objetivo de la final de la Copa Libertadores está ahora a un paso de distancia, y Valle ya ha puesto su mira en el desafío que representa el próximo rival, Palmeiras.
La actuación de Valle en el Morumbí no solo fue vital para el resultado, sino que también tuvo un efecto emocional profundo: dio tranquilidad a sus compañeros y frustró a los delanteros rivales. Al recibir la ovación de los hinchas albos, el guardameta reafirmó su compromiso con el equipo, demostrando que su entrega se extiende a cada minuto que pasa defendiendo el arco. Él es, sin duda, el reflejo de la solidez que ahora exige la semifinal.