Ya siente los colores, así celebró Christian Cueva su gol al Manta e ilusionó a todo Emelec
El peruano volvió a anotar un gol desde el punto penal y lo celebró besando el escudo
La victoria de Emelec sobre Delfín SC, que tuvo a Christian Cueva como uno de sus protagonistas, dejó una imagen que ilusionó a toda la hinchada "eléctrica": la forma en que el mediocampista peruano celebró su gol, mostrando una conexión palpable con el club. En un momento de máxima presión, Cueva volvió a asumir la responsabilidad desde el punto penal y no defraudó.
El gol del peruano fue vital para Emelec. Tras una jugada de penal a su favor, Christian Cueva se paró nuevamente frente al balón, demostrando la confianza que ha recuperado en las últimas semanas. Con una ejecución precisa, el "10" envió el esférico al fondo de la red, desatando la euforia en el Estadio Capwell.
Pero más allá de la importancia del gol en sí, lo que resonó profundamente entre los aficionados fue la emotiva celebración de Cueva. Tras anotar, el futbolista peruano se dirigió directamente hacia la camiseta y, con una mezcla de pasión y orgullo, besó el escudo de Emelec. Un gesto que, en el fútbol, es interpretado como una muestra de compromiso y apego a los colores de la institución.
Esta acción de besar el escudo fue un mensaje directo para la hinchada, disipando cualquier duda sobre su compromiso o su supuesta incomodidad en el club, rumores que habían circulado en los días previos. La celebración de Cueva fue una declaración de intenciones, evidenciando que, a pesar de las adversidades o los momentos difíciles, el peruano está identificado con la causa "eléctrica".
El gesto del "10" peruano rápidamente se convirtió en uno de los momentos más comentados del partido y se viralizó en redes sociales. Los hinchas de Emelec reaccionaron con entusiasmo, viendo en la celebración de Cueva una señal de que el jugador "ya siente los colores" del club y está dispuesto a luchar por los objetivos del equipo.
La importancia de Christian Cueva para Emelec es innegable. Su talento y capacidad para desequilibrar son fundamentales en el ataque del "Bombillo". Si a ello se le suma una entrega emocional como la mostrada al besar el escudo, su figura se agiganta aún más, convirtiéndose en un referente tanto por su calidad futbolística como por su conexión con la institución.
Este gol y su celebración no solo refuerzan la confianza del jugador, sino que también elevan la moral de todo el plantel y la afición. En un momento de la temporada donde cada punto es crucial, tener a un referente como Cueva mostrando tanto compromiso es un factor motivacional invaluable para Emelec.
La imagen de Christian Cueva besando el escudo de Emelec quedará grabada en la memoria de los hinchas como un símbolo de la pasión que el fútbol genera y de cómo un gesto puede transmitir un mensaje de unidad y pertenencia. Es una demostración de que, más allá de los resultados, la conexión entre el jugador y la camiseta es lo que realmente ilusiona a la gente.
