Ya no es príncipe, ahora es rey, muchos le dieron la espalda y hoy se baña en gloria
Luis Zubeldía es lo que se necesitaba en Liga de Quito
Liga de Quito necesitaba de un entrenador que le diera identidad, que le permitiera volver a esos años de gloria. Aunque muchos no estaban de acuerdo, Luis Zubeldía era el hombre que necesitaba el equipo para volver a lo más alto. Su pasado no era muy bueno, 0 títulos antes del 2023, varias finales perdidas y una de estas frente a Emelec.
En Copa Sudamericana parecía que no podría, Botafogo estaba al frente, pero Liga también es grande y no se dejaría aplastar. Los hinchas lo esperaban y Zubeldía mostró que estaba en busca del mejor momento. Su segundo paso no arrancó de la mejor manera, pero no se rindió y esto se notó en los partidos.
Poco a Poco el recorrido empezó a limpiarse, con Ñublense un Dida gigantesco ayudó a lograr la clasificación. Empezaron las dudas de hasta dónde llegaría Liga de Quito, pues con un rival de menor jerarquía peligró la clasificación. Zubeldía logró pelear contra la adversidad y mostró que los muchachos pondrían lo mejor por el profe y el proyecto.
Nunca descuidó el campeonato y siguió luchando en busca de bañarse de gloria y poder conseguir todos. Contra Sao Paolo armó el equipo bien, en la capital llegó a enamorar hasta a los más pequeños con sus ideas. En Brasil aguantó y cuando parecía el fin, no le abandonaron los jugadores y le dieron su mejor versión.
Con Defensa y Justicia lo volvió a demostrar, en 2015 lloraron los hinchas por la final perdida y en 2020 se quedó a puertas de la gloria. Llegó su revancha y estuvo a la final, la última prueba era Fortaleza. El partido no fue fácil y al final logró sentarse en la mesa de los más grandes, se convirtió en Rey.
Zubeldía de príncipe a Rey
Una lesión en la rodilla atrancó su sueño en 2004, la vida le dio revancha y arrancó como entrenador para no alejarse de lo que ama. Le conocían como príncipe y estuvo cerca de lograr estar en lo más alto. Finalmente es rey, tiene la corona que tanto se merecía, la vida fue tan injusta con él y llegó a tener la revancha merecida.