El entrenador de Estrasburgo reveló cómo lo convenció Kendry Páez para ser titular fijo

La llegada de Kendry Páez al fútbol europeo con el Racing Club de Estrasburgo (RC Strasbourg) ha sido una de las historias más seguidas en la Ligue 1. Más allá de su innegable don natural y el talento que lo ha llevado a ser considerado una de las futuras estrellas del fútbol mundial, el entrenador del Estrasburgo, Liam Rosenior, ha revelado la verdadera clave que ha catapultado al joven ecuatoriano a la titularidad: su actitud y su rápida adaptación al grupo.

Rosenior, el hombre al mando del equipo filial del Chelsea, no escatimó en elogios al referirse a la joya ecuatoriana. El estratega británico reconoció públicamente que Páez es un "chico con un don" y un "jugador con muchísimo talento". Sin embargo, en el fútbol de élite, el talento por sí solo rara vez garantiza el éxito. La Liga 1 es una competición física y tácticamente exigente, y la simple habilidad no basta para convencer a un entrenador que tiene la presión de obtener resultados.

Lo que realmente convenció a Liam Rosenior para darle un puesto fijo en el once inicial no fueron solo sus destrezas con el balón, sino su mentalidad. Rosenior destacó cómo Páez se "adaptó rápidamente" al grupo, un punto crucial para cualquier jugador extranjero que llega a una nueva cultura y un nuevo idioma. Esta capacidad de integración demuestra una madurez que trasciende su corta edad y facilita el trabajo del cuerpo técnico y la armonía del vestuario.

El aspecto más relevante que Rosenior quiso enfatizar fue la ética de trabajo del ecuatoriano: "Pero lo que quiero destacar es cómo se ha adaptado al grupo y cómo trabaja para estar a su altura. Tiene una actitud extraordinaria". Esta declaración es fundamental porque revela que Páez no se conformó con su talento. Entendió que, para competir al nivel europeo y ganarse la titularidad, debía igualar o superar el esfuerzo físico y táctico de sus compañeros más experimentados.

Esta actitud extraordinaria es la que diferencia a los grandes talentos que triunfan de aquellos que se quedan en el camino. Al mostrar una disposición total para el sacrificio, la disciplina táctica y el compromiso diario, Kendry Páez se ganó la confianza absoluta de su entrenador. Rosenior vio en él no solo al futuro del Chelsea, sino a un jugador dispuesto a rendir en el presente y que no se considera superior al trabajo en equipo.

En definitiva, la titularidad fija de Kendry Páez en el Estrasburgo no es un simple regalo a su potencial, sino una merecida recompensa. El cuerpo técnico, liderado por Liam Rosenior, fue seducido por la profesionalidad y la humildad con la que el joven ecuatoriano ha abordado su primera experiencia europea. Es la combinación de su "don" natural con su compromiso de trabajo la que lo ha convertido en un jugador indispensable para el club francés.