Es el peor DT en la historia de BSC jugando de local y destaparon la millonada que costaría sacar a Ismael Rescalvo

La gestión de Ismael Rescalvo en Barcelona Sporting Club (BSC) se ha hundido en un récord negativo que estremece a la hinchada: el técnico español es señalado como el entrenador con el peor rendimiento en la historia del club jugando como local en el Estadio Monumental. Para un equipo que tradicionalmente hace de su casa un fortín inexpugnable, este dato es devastador. Tener un porcentaje de puntos obtenidos por debajo del 50% en el Monumental no solo compromete los objetivos deportivos, sino que hiere profundamente el orgullo de una afición que exige respeto por su historia y su estadio.

Bajo la dirección de Rescalvo, el Estadio Monumental ha perdido su histórica condición de "templo amarillo" para convertirse en un terreno casi neutral. Los rivales ya no sienten la presión abrumadora de antaño, y los resultados lo demuestran. La incapacidad de BSC para dominar consistentemente a sus oponentes en su propio campo es el síntoma más claro de un proceso fallido. Este bajo rendimiento en casa no solo frena al equipo en la tabla, sino que es el principal combustible de la furia de la afición, que ve cómo el equipo se achica en el lugar donde debería ser más fuerte.

Ante la debacle deportiva y la presión social, el principal obstáculo para la dirigencia de Barcelona SC es el elevado costo de la cláusula de salida del entrenador. Se ha destapado que rescindir el contrato de Ismael Rescalvo costaría una millonada que ronda el millón de dólares. Esta cifra representa un problema financiero gigante para un club que opera con presupuestos ajustados. La directiva se encuentra en un callejón sin salida: mantener al DT con el peor récord local y arriesgar el campeonato o pagar una suma exorbitante para despedirlo.

El club se enfrenta a una dolorosa disyuntiva económica. Pagar un millón de dólares para cortar el vínculo con Rescalvo es el costo directo de una mala decisión de contratación. Sin embargo, el costo de la inacción podría ser aún mayor: quedarse sin títulos, perder ingresos por taquilla ante la desilusión de la hinchada y comprometer futuras participaciones internacionales. En el fútbol, el costo de un fracaso deportivo a gran escala, impulsado por el peor rendimiento local, puede superar rápidamente el monto de cualquier cláusula.

Para la afición de Barcelona SC, la pregunta ya no es si Rescalvo debe irse, sino cuándo. La hinchada, harta del mal juego y el terrible rendimiento en el Monumental, exige un sacrificio financiero a la directiva. Argumentan que el costo de la cláusula es preferible al costo de la humillación deportiva y que un nuevo aire, aunque caro, es la única esperanza de salvar lo que queda de la temporada. La presión se centra en que los dirigentes asuman su error y paguen la millonada para restaurar la dignidad deportiva del equipo.

La millonaria cláusula de rescisión de Ismael Rescalvo ha creado una verdadera trampa contractual para Barcelona SC. El DT, protegido por esta cifra, parece inamovible a pesar de los resultados que lo ubican en un récord histórico negativo. La dirigencia debe sopesar si el millón de dólares es el precio justo para evitar que el "peor rendimiento" se convierta en una tendencia irreversible y acabe con todas las aspiraciones del club. Mientras el equipo se desmorona en su propia casa, el futuro de BSC pende de una decisión que será tan costosa como dolorosa.