Perdieron la paciencia, lo que dijeron los hinchas del Arsenal de Piero Hincapié ahora que salió de su lesión
Arteta confirmó que lo podrán tener disponible para el duelo de Champions ante Atlético de Madrid
La noticia del regreso a los entrenamientos de Piero Hincapié tras superar una lesión en la ingle ha sido recibida con una mezcla de alivio y escepticismo por parte de la afición del Arsenal, especialmente en las redes sociales. A pesar de la calidad indiscutible del defensor ecuatoriano, el hecho de que solo haya disputado seis minutos desde su millonario traspaso ha encendido las alarmas, llevando a una parte de los seguidores a cuestionar la idoneidad del fichaje.
El principal punto de preocupación, tal como lo reflejan los comentarios en plataformas digitales, gira en torno a la capacidad de Hincapié para adaptarse a la intensa metodología de Mikel Arteta. Los hinchas han notado la recurrencia de lesiones musculares en el equipo, y en el caso del ecuatoriano, que no tuvo una pretemporada completa debido a una cirugía previa, la molestia en la ingle que sufrió al poco tiempo de llegar ha sido vista como un indicio de que su cuerpo no está asimilando bien la elevada carga de trabajo y el ritmo de entrenamiento de la Premier League.
Esta inquietud se ha traducido en la impaciencia que caracteriza a la afición de un club de élite como el Arsenal. Algunos seguidores han llegado a catalogar la transferencia como un potencial "error" o "fichaje fallido" prematuramente, argumentando que el club pagó una suma considerable por un jugador que, hasta el momento, ha pasado más tiempo en la enfermería que en el campo. El debate no se centra en su talento, sino en su disponibilidad y resiliencia física ante la exigencia de Arteta y el fútbol inglés.
La frustración de los hinchas es comprensible, dado que Hincapié fue fichado para aumentar la profundidad y la calidad defensiva del equipo en momentos clave, especialmente después de que otros jugadores también cayeran lesionados. Sin embargo, su ausencia prolongada ha impedido que el entrenador español cuente con la rotación deseada. La afición teme que, si el patrón de lesiones continúa, Hincapié se convierta en una carga económica sin el retorno deportivo esperado, sobre todo considerando la opción de compra obligatoria de su préstamo.
El propio Mikel Arteta ha intentado mitigar estas preocupaciones, elogiando la determinación del ecuatoriano y explicando que la lesión se debió a la falta de pretemporada y al cambio en la carga de trabajo. No obstante, la afición sabe que las palabras deben traducirse en hechos. Hincapié, ahora que está de vuelta, se enfrenta a la doble presión de demostrar que está físicamente apto para el ritmo del Arsenal y de convencer al cuerpo técnico de que merece un puesto en una defensa con una jerarquía ya establecida.
La paciencia de un sector de los hinchas del Arsenal se ha agotado. El regreso de Piero Hincapié al campo de entrenamiento es solo el primer paso. El defensor ecuatoriano no solo debe luchar por minutos, sino también por disipar la sombra de la duda que se ha cernido sobre su fichaje. Necesita con urgencia una racha de partidos sin lesiones para demostrar que su adaptación es un problema de tiempo y no una incompatibilidad con el nivel físico y táctico que exige el proyecto de Mikel Arteta.