Hinchas del Flamengo se unieron a favor de Liga de Quito y les mandaron un mensaje antes de enfrentar a Palmeiras
Los hinchas del Fla van por LDU como pasó en el 2008 cuando se midieron al Fluminense en la final de la Libertadores
La anécdota compartida por el hincha Christian LDU en su cuenta de X (anteriormente Twitter) es una muestra fascinante de la huella que Liga Deportiva Universitaria de Quito ha dejado en el subconsciente del fútbol brasileño, particularmente entre los aficionados del Flamengo. Viajar a Brasil luciendo la camiseta de LDU, un club que históricamente ha sido un "verdugo" para los rivales del "Mengão", generó una reacción social completamente inesperada.
Según el relato de Christian, su presencia con la camiseta blanca de Liga desató un verdadero frenesí entre los torcedores del Flamengo. Lejos de la rivalidad o el rechazo que se podría esperar en un país con una cultura futbolística tan apasionada, los hinchas del club carioca se "volvieron locos" al ver el escudo de LDU. El fanático ecuatoriano comentó: "Nunca me habían pedido tantas fotos jaja me veían con la camiseta de Liga y se emocionaban".
Esta efusiva reacción se explica por el complejo entramado de rivalidades en el fútbol brasileño. LDU es recordado históricamente por sus victorias épicas en finales internacionales contra Fluminense (Libertadores 2008 y Recopa 2009). Dado que Fluminense es uno de los archirrivales más importantes de Flamengo, la camiseta de Liga se convierte automáticamente en un símbolo de la "anti-Flu" y, por extensión, en un estandarte de apoyo para los aficionados flamenguistas.
El mensaje de los hinchas de Flamengo para LDU
El punto culminante de la anécdota fue el saludo y el deseo expresado por los hinchas del "Fla" al hincha ecuatoriano. Con un entusiasmo desbordante y una mezcla de admiración y cábala, le decían: "nos vemos en la final". Este comentario refleja el sueño compartido de ver a sus respectivos clubes triunfar en torneos continentales y, de paso, mantener viva la leyenda de LDU como el equipo que siempre complica a los grandes de Río de Janeiro.
Este episodio de admiración masiva subraya que Liga de Quito trascendió las fronteras y se ganó un respeto casi místico en Brasil, no solo por sus títulos, sino por su capacidad para derrotar a gigantes en sus propios estadios. Es un raro fenómeno en el que el enemigo de mi enemigo se convierte en mi amigo, elevando al equipo ecuatoriano a un estatus de leyenda en la cultura popular de la hinchada rival.